Críticos del PP quieren aprovechar la Pokémon para relanzar a Paula Prado en Santiago
El partido ratifica la confianza en el alcalde Ángel Currás// La diputada pretende seguir en Raxoi pero su acta está a disposición del presidente de Feijóo // Su objetivo declarado es el de convertirse en alcaldesa// El caso Rebeca reaviva las diferencias en los populares
Decía Pío Cabanillas (padre) aquello de "líbreme Dios de mis amigos que de mis enemigos me defiendo yo". Esta frase pronunciada cuando las distintas familias de UCD se acuchillaban, literalmente, para ganar cuotas de poder está muy vigente hoy en día en el seno del Grupo Municipal del PP en el Concello de Santiago, dividido en dos partes tras la dimisión del anterior alcalde Gerardo Conde Roa, por sus problemas con Hacienda.
Uno de los líderes más respetados e influyentes del PP en Galicia hablaba ayer de una especie de maldición bíblica entre el partido y el Ayuntamiento de Compostela remarcando que siempre que se hacían con la alcaldía no la perdían por mala gestión sino por las divisiones internas entre sus miembros.
Ponía de ejemplo el caso de Ángel Currás que en, los apenas siete meses que lleva en el cargo, se encontró con más problemas dentro de su grupo que con los ediles de la oposición. El sector crítico, liderado por Paula Prado, está haciendo más por desgastar al alcalde que los ediles del PSdeG y Bloque juntos.
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