Encuentran un nuevo grabado rupestre en el Castriño de Conxo
El petroglifo, que no figura en la documentación arqueológica, aparece en posición casi vertical
Un aficionado que visitaba los pasados días la estación rupestre del Castriño de Conxo, descubierta por Ramón Sobrino Buhigas en 1935, advirtió gracias a la posición del sol un grabado que no figura en la documentación arqueológica publicada hasta ahora, y que se encuentra a escaso metro y medio de los grabados ya conocidos.
El petroglifo aparece en disposición casi vertical, a diferencia de otras armas grabadas en la parte superior de la misma roca. Se trata de la representación de un puñal o espada corta, con una hoja de unos 45 cm de largo con nervadura central y acanaladuras, de un tipo que pudiera corresponder a la Edad del Bronce (II milenio a.C.).
Otros petroglifos gallegos con representaciones de armas adoptan esa colocación vertical, que conducen a los expertos a una posible interpretación como panoplia de armas o exhibición de poder militar.
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