"Fue una noche excepcional porque era su despedida"

García Balado destaca de aquella majestuosa artista el "chorro que salía de su garganta con ese padecimiento cargado de matices imposibles". El concierto que Vargas dio en Santiago fue histórico por muchos motivos. El público se mostró completamente entregado, quizás porque sabían, tal y como recuerda el musicólogo, "que aquella noche compostelana era la de la despedida definitiva, por lo que tenía pues de excepcional". Así, fueron surgiendo las canciones una detrás de otra hasta que llegó uno de los momentos álgidos, con la interpretación de Marcorina, el tema estrella con el que el público se encendió definitivamente. Para acabar, Balado destaca la figura de la cantante, "una leyenda viva que, con dignidad, paseó esa desmesura con su personalísimo estilo".