Futuro empresarial

Los empresarios estamos acostumbrados a vivir siempre con riesgos e
incertidumbres. Y, como la economía es cíclica, habituados también a sufrir periódicamente. A pesar de un cierto enfriamiento en los últimos meses, los que sobrevivimos a la crisis de 2008 hemos saneado nuestros balances y minorado el endeudamiento en términos generales, además de volver a generar empleo.

Y en esto llegó el covid-19, cuyas consecuencias inmediatas fueron demoledoras, aunque todavía desconocemos su verdadero alcance. Y, por si fuera poco, jamás habíamos vivido un confinamiento de la población.

A pesar de todo, tenemos que recuperar el aliento y explorar nuevos modos de producción y comercialización, así como nuevas rutinas de trabajo. El éxito siempre está en la capacidad de adaptación al medio, tanto de empresas como de trabajadores.

En la Asociación Empresarial del Tambre llevamos años apostando por la reindustrialización de la ciudad sobre dos áreas de futuro, futuro que hoy ya se ha hecho presente, por necesario y urgente.

Es el caso de la biotecnología, que junto al sector de la transformación de la madera, constituyen los dos ámbitos sobre las que estamos construyendo un entramado de colaboración público-privada que nos llevará a la creación de un polo innovador en terrenos del polígono de A Sionlla.

En estos días, los actores que conformamos esta plataforma celebraremos una reunión telemática para dar los últimos pasos del lanzamiento definitivo del proyecto.

Por otro lado, conscientes de las grandes dificultades de nuestras empresas, hemos alcanzado un acuerdo con el Banco Sabadell al objeto de conceder financiación inmediata y en buenas condiciones a nuestros asociados. También diseñaremos un fondo o modo de recaudar donaciones para poder ayudar, aunque sea levemente, a las familias que tengan mayor necesidad una vez que pasen los meses y salgan a la luz nuevas realidades sociales.

Igualmente estamos en contacto permanente con las autoridades municipales compostelanas de cara a aprovechar con el máximo rendimiento y eficacia las ayudas que se han puesto en marcha desde el pazo de Raxoi.

Ahora bien, en esta situación inédita es el Estado el que tiene que dar una respuesta general, rotunda y consensuada a la hora de combatir no solo el coronavirus, sino también el descalabro económico-empresarial; así como mantener una posición firme y exigente en la UE.

El mundo ha cambiado y sus reglas, también. Así que, como dicen los expertos, a situaciones nuevas, nuevas e imaginativas soluciones. Todos tenemos algo que aportar.