La industria maderera insta a activar un plan forestal con fondos que evite su extinción
No quiere que Galicia acabe siendo el "brasero de Europa" por el tema biomasa // Receta apostar por el valor añadido
Galicia, 1992. Se conseguía lo que parecía imposible: un plan forestal nacido del consenso que, además de directrices, prometía que el sector recibiría nada menos que el 3% anual de los Orzamentos de la Xunta. Veintiún años después, de los 600 millones de euros que debían haber impulsado el monte gallego y su industria no hay rastro, apenas se materializó "un uno y pico por ciento".
Ahora que la Consellería do Medio Rural inicia los contactos para actualizarlo, Confemadera Galicia reclamó ayer un "compromiso" de toda la sociedad gallega por un modelo de desarrollo sostenible del monte que rentabilice y preserve la riqueza forestal.
Desde el edificio Quercus de Santiago, el presidente de esta patronal, Elier Ojea, y la secretaria general, Ana Orons, aprovecharon la presentación de las actividades de la Semana Forestal Europea que arranca el lunes para apuntar que "si el primer reto es hacer un plan forestal adecuado, el segundo es cumplirlo". Y con el respaldo de fondos.
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