Juan cabrejo, del fútbol a la concejalía de deportes

El pasado domingo,varios deportistas se fueron a la cama sabiendo que se abria para ellos una nueva vida en el mundo de la política. La atleta Ruth Beitia veía como las urnas la convertían en nueva diputada del Parlamento de Cantabria por el PP. El ciclista Prudencio Indurain, hermano del pentacampeón del Tour de Francia, confirmaba que le esperaba un puesto en el Parlamento de Navarra por  Unión del Pueblo Navarro. Y en Camariñas, el futbolista Juan Cabrejo, que fue figura en las filas de la SD Compostela y dejó buenas pruebas de su clase en equipos como el Eibar, Elche, Ceuta, Cartagena y, ahora mismo, en el Cerceda, concluía la jornada con un asiento en la Corporación municipal de su villa natal, donde, con toda seguridad, se encargará, entre otros asuntos, de las cuestiones deportivas. Parece claro que su perfil encaja en un puesto como este, sin olvidar que el deportista camariñán es, junto con Mario Pasantes, mas conocido como Camuel, una de las glorias deportivas de la capital del encaje de bolillos.

Sobre la situación que atraviesa en Galicia el fútbol de alta competición, Cabrejo confió hasta última hora en la salvación del Deportivo. También desea el ascenso del Celta, lo que sería muy bueno, dice, para un fútbol como el gallego, en el que cree que se no se dan oportunidades a los futbolistas jóvenes. Piensa que ese es el gran problema, por lo que aboga por el apoyo a los canteranos, como hace el Barcelona, precisa.

Está convencido de que en Galicia hay buenos jugadores, por lo que entiende que hay que saber valorarlos y dar oportunidades a la gente de la tierra, como hizo en su día el Compostela con él. Quizá también por eso, nunca olvidará al presidente del club, José Mª Caneda. Sobre él dice que “siempre será el presidente que me dio la oportunidad de jugar a nivel nacional”.

Antes de darle el sí al alcalde, Manuel Valeriano Alonso de León, y a la diputada Marisol Soneira, del PSdeG-PSOE, Juan Cabrejo dijo varias veces no. Sus padres tienen un bar muy popular, el Arnela, y él no quería que su salto a la política les perjudicase. Pero, al final, pensó que su nueva situación iba a permitirle hacer muchas cosas por su pueblo y sólo por eso, animado, además, por la familia y los amigos, decidió aceptar. Con el alcalde tiene una relación de amistad… y de compañero, ya que el regidor camariñán fue también un destacado futbolista, muy conocido en toda la comarca.

Hay que recordar que a Juan Manuel Cabrejo Pasantes le gustan tanto los deportes, sobre todo el fútbol –quizá influenciado por el ejemplo de su padre y de su abuelo, que fueron muy buenos con el balón–, que a su hijo le puso Diego, en honor a Diego Armando Maradona. Piensa que el argentino quizá no sea el mejor ejemplo como persona, aunque tampoco lo critica, pero, deportivamente, dice, dejando clara la profunda admiración que siente por el de Lanús, Maradona ha sido lo máximo.
Juanillo, como le lllaman cariñosamente los amigos de su pueblo y su esposa, Begoña, tienen dos hijos: Sofía, de nueve años, y Diego, de cinco. A él no le gustaría que fuesen políticos, sino buenos deportistas y, mejor aún, futbolistas. Pero reconoce que, al final, serán ellos los que decidan. Sólo desea una cosa: “que teñan sentidiño”.