Nieves Lagares: “Implantar el grado ha sido el gran éxito de estos cuatro años”

El diseño y la aprobación del grado de Ciencias Políticas e da Administración, uno de los dos primeros títulos de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) adaptado al Espacio Europeo de Educación Superior, puso el curso pasado al alumnado de la facultad en huelga durante varias semanas. Las formas del proceso tampoco sentaron bien a parte del profesorado, pero esta semana Nieves Lagares Díez ha sido reelegida decana del centro por cuatro años más con un amplio respaldo de sus colegas. La profesora se siente respaldada en la nueva etapa y niega las acusaciones de su contrincante, Ramón Bouzas Lorenzo, que ha denunciado ante la junta electoral de la USC una serie de presuntas irregularidades. De aquí a 2013, completarán su equipo María Antonia Arias Fernández, como secretaria de la facultad, y Cristina Ares Castro-Conde, como vicedecana.

_ Después de la polémica en torno al título de grado, ¿se siente respaldada en su gestión de los últimos cuatro años?

_ A la vista del resultado electoral, con una mayoría absoluta en la primera vuelta, siento que cuento con apoyo. Sabía que teníamos prácticamente el apoyo del 90 por ciento del profesorado, pero que no faltaba el del alumnado, porque en esta junta de facultad aún están los representantes de hace un año, que son estudiantes anti-Bolonia. De hecho, el vicedecano, Miguel Bastos, dimitió para presentar también su candidatura, para ver si él era capaz de conseguir el apoyo de los estudiantes, porque siempre ha tenido muy buena relación con ellos. La verdad es que yo no quería presentarme y la decisión de que él presentase también su candidatura fue algo que consensuáramos. Pero no le fue posible conseguir esos apoyos de los alumnos y finalmente se retiró del proceso.

_ Su rival, Ramón Bastos, dice que carecía de legitimidad para nombrar en pleno contexto electoral una nueva vicedecana, que hasta entonces no era miembro de la junta de facultad, pero que también tuvo derecho a voto, uno más a su favor...

_ La razón del nombramiento de Cristina Ares fue la dimisión de Miguel Bastos para, como dije, él presentase también su candidatura. Pero yo no nombro a la vicedecana, yo la propongo y es el rector quien la nombra.

_ ¿Y que hay de los dos alumnos que fueron desconvocados de la junta un día antes de la elección, sin que haya constancia de que se notificase a sus sustitutos su nueva condición de miembros de la junta?

_ Eso depende de la Secretaría Xeral de la Universidad, igual que el nombramiento de los suplentes. Y la decisión se tomó porque esas dos personas ya no estaban matriculadas en la USC.
_ El nuevo grado de Políticas e Ciencias e da Administración lleva ya más de tres meses en marcha, ¿está funcionando?

_ Como docente de una asignatura de segundo, la experiencia ha sido muy gratificante. Tanto los profesores como los alumnos están mucho más satisfechos. Los grupos reducidos y las tutorías individualizadas permiten más feedback entre unos y otros. Como decana creo que puedo decir con bastante rotundadidad que ha sido el gran éxito de estos cuatro años.

_ ¿Pero exige el Espacio Europeo de Educación Superior más trabajo al profesorado?

_ Sí, requiere mayor dedicación y esfuerzo. Pero hay que cambiar no tanto el programa y los contenidos como la forma de impartir las clases.

_ ¿Hace falta más docentes para implantar la reforma europea por completo? Suele ser una queja habitual en la universidad...

_ Tenemos necesidad de incrementar la plantilla, pero era algo que nos pasaba ya antes de adaptarnos a Bolonia, ya partíamos antes de implantar el grado de una situación de déficit. En los próximos años obligatoriamente tendremos que aumentar el personal.

_ El proceso de diseñado del nuevo grado estuvo envuelto de polémica, ¿Se ha resentido la matrícula por la polémica que generó el diseño del grado?

_ El ruido que se generó en torno al plan de estudios ha tenido cierta incidencia en la matrícula, era inevitable, pero no fue muy significativa. Este año empezaron en primero setenta y siete alumnos, cuando antes los solían hacerlo entre cien y ciento veinte. Pero tengo la confianza de que la matrícula se recupere.

_ Con el nuevo título ya en marcha, ¿cuáles son los demás retos que se fija para los próximos cuatro años?

_ Completar la oferta con los posgrados oficiales es otro de los retos que tenemos encima de la mesa. En el próximo curso, en el 2009-2010, la facultad va a ofrecer un máster en Xestión Pública, del Departamento de Ciencia Política; y otro de Xuventude, del Departamento de Socioloxía, que se va a ocupar de las políticas de juventud.

_ El de Administración incide en la que es una de las principales orientaciones de los titulados de su centro, ¿no?

_ Sí, es una de las orientaciones más fuertes de la carrera y en la que tiene má salidas profesionales. Pero deberíamos completarla en años posteriores con otros títulos de posgrado de áreas también tradicionales: política internacional y política de actores.

_ ¿Cómo es la inserción laboral?

_ No hay datos oficiales y sistematizados, pero por el seguimiento de antiguos alumnos sabemos que el índice de inserción laboral es alto. Lo que pretendemos sobre todo con la reforma es, además de cumplir con la obligación de adaptarnos al Espacio Europeo de Educación Superior, hacer visible cuál es el perfil profesional de un politólogo. Creo que la reforma nos ayudará a darnos esa identidad ante la sociedad.

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