"Nuestro propósito es decirle al mundo que se puede hacer una serie en gallego de calidad"

Capítulos 1 y 2 muy potentes de la segunda temporada de ‘O sabor das margaridas’. ¡Qué intensos! ​

Sí. El primer capítulo demarca un poco el tono y bueno, esta segunda temporada es muy diferente a la primera. La apuesta era más arriesgada para el público de TVG, pero creo que también es necesario, porque sus espectadores precisan ofertas variadas, de todo tipo. En ese sentido, la cadena acierta con una variedad de propuestas como pueden ser comedias, thrillersmás tradicionales o esta segunda temporada ‘O sabor das margaridas’, que esperemos que vuelva a saltar a la plataforma Netflix y se convierta otra vez en el éxito que obtuvimos en la primera.

¿Eres consciente de que mucha gente estaba esperando este estreno? ¿Qué os decían en redes ?

Sí, sí que éramos conscientes de los comentarios que les llegaban a los actores por redes sociales. Ahora que tenemos ese mecanismo de contacto con el público, también hay mucha gente de fuera de Galicia, incluso de otros países, que estaba deseando verla y nos estaba preguntando de manera constante cuándo estará en Netflix, pero bueno, por el momento no tenemos noticias del estreno, aunque sí pueden verla dentro de la página de TVG o seguirla a través del canal en cualquiera de sus emisiones.

Pero estamos contentos porque la respuesta del público en general en redes sociales ha sido muy buena. Y bueno, ahora deseando que puedan ver estos seis capítulos y saber qué les ha parecido esta historia que les proponemos.

Competíais en el estreno con películas como La isla mínimay Gladiator. ¿La respuesta fue positiva a pesar de todo?

Por la situación en la que vivimos, es un tiempo difícil, y aunque mucha gente me decía que era un buen momento para emitirla -por el confinamiento en las casas-, yo creo que no es un factor decisivo a la hora de que tu producto vaya a funcionar o no; sabemos que nuestra propuesta es muy arriesgada. Sabíamos que competíamos con grandísimos formatos como Telecinco, con Supervivientes, y como decías, con La isla mínima.

Todos los días hay una competencia dura. Pero respecto a la aceptación de público, pienso que es lo que nos esperábamos un poco. Sí es cierto que atrae a muchísimo público joven, eso sí que lo hemos constatado en la franja de edad de 17-28 años, donde fuimos líderes. Y eso sirve para que de forma muy inteligente haya que darle una programación al público estable y fiel a la TVG, pero también hay que apostar por productos que te traigan nuevas generaciones, que son los que van a ser los futuros consumidores de una televisión pública.

Yo creo que no deberíamos ser siempre tan esclavos de las audiencias y saber diferenciar. Hay productos que sirven para tener audiencia, o para atraertargetsque se quedan olvidados y hay productos que sirven para dar prestigio a tu canal, con independencia de la audiencia.

Y es que a lo mejor no es de público generalista, no es para todos, es un thrillermuy complejo, busca una audiencia que le guste más jugar con el género. Es una serie cuyo propósito era llevar el gallego al mundo y decirles a todos que se puede hacer una serie en gallego y con calidad para demostrar que nuestro audiovisual no está solo hecho por gallegos, sino también en nuestra lengua.

¿Qué me puedes decir del personaje que interpreta María Mera, Eva Mayo, que padece problemas mentales y su instinto vengativo está más encendido que nunca?​

En la segunda temporada nos nutrimos mucho de la repercusión en redes sociales de la primera. Sí que vimos qué es lo que había gustado más del personaje que interpreta María Mera. Sin duda, tenía un peso muy grande. Con lo cual, sabíamos que era un personaje insustituible, y todo dentro de una evolución lógica de la trama, porque apostamos por una serie que diese continuidad.

Sí hay un nuevo caso. Sí que ahora Eva Mayo busca a Rebeca, hija de Mauro Seoane…, pero sí que arrastra mucho de la primera. Entonces nos parecía interesante eso, poder representar un personaje que tiene problemas personales. Ver ese mundo interior creo que hoy en día es fundamental para que un producto te enganche viendo la cantidad de propuestas que te encuentras. Y lo que hace una serie especial y única son tus personajes.

Tenemos a una Eva Mayo muy diferente, con un empeoramiento de su estado mental. Y este año parece que da un poco de miedo.

¿Qué me puedes contar de la canción de la serie? Es enigmática.

Apostamos por un compositor nuevo, Xácome Alcántara, que no había hecho antes nada para el audiovisual, no había hecho bandas sonoras para ficción, pero sí nos gustaban mucho las propuestas que hacía. Quisimos una banda sonora más arriesgada, más atmosférica, más conceptual y no tan melódica, de alguna manera.

Es cierto que para la música de la cabecera se contactó con una chica de Noia que nos propuso, y que tampoco tenía ningún álbum editado. Fue una especie de captación de talento a través de redes sociales. Y bueno, sobre todo aquí en Galicia, que lo tenemos en cada esquina, en cada pequeño pueblo. Siempre hay alguien mostrando todo este talento. Nosotros fuimos a buscarlo y a ver que salía. Hay gente joven con muchísimo talento que necesita una oportunidad.

Pero volviendo al tema de la cabecera, me parece maravilloso, y que sea en gallego es una declaración de intenciones. A nivel conceptual para el compositor, toda la banda sonora tiene cierta reminiscencias a esa música de cabecera en cuanto a tonalidades, en cuanto a sonidos. Y bueno, estoy esperando que el público pueda apreciar esos cambios, esos pequeños matices a los que le ponemos tanto cariño a la hora de hacer la serie y creo que al final la convierte en un todo, que es lo que hace que te guste o no .

Seguimos también con las referencias a Dante y La divina comedia, ¿verdad?

Sí, bueno, Dante se ha convertido un poco en el universo de la serie. La divina comedia es su descenso a los infiernos. Y en O sabor das margaridases el de nuestra protagonista. Es cierto que este año hemos jugado como en dos niveles. Por un lado, va a jugar un subtexto muy relacional con Alicia en el país de las maravillas, que es como una Divina comedia, pero para niños. Eva Mayo se adentra en un mundo oscuro, como el de la trata de menores.

¿El conejo blanco del primer capítulo tiene algo que ver?

Sí, digamos que es la primera referencia al libro. Luego si uno busca por Internet encontrará cosas maravillosas, por decirlo de alguna manera.

Miguel Conde fue el director de la primera temporada. Ahora es Álex Sampayo. ¿Tiene algo que ver con grandes produciones, como House of Cards, donde no todos los capítulos estaban dirigidos por la misma persona?

En parte sí, es una mezcla de compromisos profesionales, pero sí es cierto que la primera temporada, dirigida por Miguel Conde, fue fantástica. Luego él ya estaba metido en otros proyectos cuando lanzamos la segunda temporada. Y obviamente, dentro de esta vorágine de series de ficción, es muy difícil encontrar grandes profesionales. Pero Álex siempre ha sido un director con el que hemos querido trabajar. Siempre ha estado ahí, aunque quiso tomarse un respiro después de su película Schimbarey se refugió un poco más en el teatro.

En la primera temporada ya habíamos hablado con él para enseñarle la serie, que nos diera un poco el feedback. Entonces creo que el género le iba como anillo al dedo. Cuando hablamos con él no tardó nada en tomar la decisión de asumir ese reto, porque al final es como una especie de película de seis capítulos. Y al ser un formato pequeñito, preferimos apostar por un director para que la gente pueda tener ese sello particular de cada uno de ellos.