Sólo dos gallegas en Goteborg

El dato no es muy alentador: sólo dos representantes de Galicia, dos chicas, entre los 78 del equipo español en el Campeonato de Europa al aire libre, que se celebrará entre los próximos días 7 y 13 de agosto en la localidad sueca de Goteborg. Así, a primera vista y para cualquier profano en la materia, el dato habla de un deporte poco vitaminado. "Es lo que hay", es la frase más repetida por atletas y técnicos del atletismo gallego.

En Suecia, Galicia estará representada por Eva Arias, que recientemente se proclamó en Zaragoza subcampeona de España de 1.500 metros, y por Dolores Pedrares, que también fue segunda en la capital maña en lanzamiento de martillo. Y lo cierto es que Galicia brilló en Zaragoza: consiguió seis medallas, entre ellas las dos de oro de Gustavo Dacal (jabalina) y Luis Moro (salto con pértiga).

"Respeto mucho la decisión del seleccionador, José María Odriozola, pero pienso que en Goteborg podría haber cinco o seis gallegos. No sólo Dacal y Moro, sino otros como Begoña Garrido, que se queda fuera al no llevar España relevo femenino de 4x400 metros", dice Sergio Vázquez, presidente de la Federación Gallega de Atletismo.

Claro que Vázquez no cuenta con un pequeño inconveniente: Dacal y Moro (éste, pese a ser júnior, es campeón de España absoluto y ya ha saltado 5.30 metros) no han logrado la mínima que se requería para estar presentes en Goteborg.

Vázquez continúa: "El atletismo gallego está bien, se vio en Zaragoza con las medallas obtenidas y, sobre todo, en el número de finalistas. Pero, sobre todo, tiene un futuro espléndido: hay atletas muy jóvenes que ya están representando a España".

Un enfoque diferente

Dolores Pedrares no comparte el optimismo del presidente federativo. Para ella, el presente es tan sombrío como el futuro. "El problema lo tiene el atletismo español en general: no hay gente que venga por detrás para relevarnos. No hay ni calidad ni calidad en las categorías inferiores, en Galicia y en España. Al menos en lanzamientos, el problema es que no hay gente", afirma.

Al lado del clásico argumento de que el atletismo es muy sacrificado, Pedrares apunta que "recientemente hubo un encuentro internacional júnior y sólo había un gallego: eso es sintomático. En Galicia no hay instalaciones, por ejemplo sólo hay una pista cubierta, en A Coruña, con lo que llueve. Y hace mucho tiempo que aquí no se celebra un Campeonato de España, ni hay competiciones atractivas".

Eva Arias comparte la idea y apunta, además, a la planificación deportiva: "No sé lo que hará este nuevo gobierno por el deporte, pero llevamos unos años muy estancados. Puede sonar a materialista, pero el atleta vive de becas y ayudas: sin éstas, sin medios, no podemos tirar hacia adelante", recuerda.

Para Arias, "hasta los veinte años el atletismo es un juego, a partir de ahí llega lo serio. Y en Galicia no se comprende muchas veces que el atletismo de elite es una profesión. Lo digo con pena: cada comunidad tiene lo que se merece. Y lo que se hace en Galicia no es lo mejor que se podía hacer. Habría que escuchar más a los atletas", concluye.