Santiago potencia este año su Navidad mientras Vigo roza ya el lleno hotelero

Santiago se prepara para vivir una Navidad cuando menos más animada que la de los últimos años. Después de una legislatura en la que todos los esfuerzos del gobierno de Compostela Aberta se centraron en quitarle protagonismo a unas fiestas con marcado significado religioso, tratando de destruir algunos de sus más importantes símbolos, como la retirada del Belén de la plaza del Obradoiro, todo apunta a que en esta edición las aguas volverán a su cauce.

El actual ejecutivo municipal, liderado por el socialista Xosé Sánchez Bugallo, quiere potenciar de nuevo esta celebración con tanta tradición, puesto que más allá de su significado es también una gran oportunidad para llenar de vida las rúas de la capital gallega y, por tanto, para el comercio y el sector hostelero. Para conseguirlo ha decidido, entre otras iniciativas, duplicar el presupuesto para el alumbrado navideño, que pasará de los 100.000 euros que solo le atribuía el equipo de Martiño Noriega a los 215.985 dispuestos para este edición. Esta partida permitirá llenar de luz y ambiente las calles del casco histórico y también el Ensanche compostelano.

De la instalación de los arcos, que se encenderán el 5 de diciembre, se encarga la empresa Iluminaciones Santiaguesas, ganadora del concurso. De hecho, la compañía ya inició la colocación de las primeras luminarias en la zona monumental, donde un infinito manto de luces led con tonalidades claras cubrirán las principales rúas.

La inversión en alumbrado navideño se complementará con un programa de actividades y también con un mercadillo navideño en la rúa Carreira do Conde, así como en otros puntos de la ciudad, como novedad de este año.

Toda esta inversión tiene como objetivo que revierta en la ciudad. Tal y como remarcó el concejal de Festas, Gonzalo Muíños, en unas declaraciones recientes a este periódico, "no se trata de competir con Vigo sino de responder a una demanda histórica del comercio compostelano".

Lo cierto es que el plan que Abel Caballero ha trazado para la Navidad de Vigo lleva años dando sus frutos. Y cada vez más. La ocupación hotelera para esta campaña navideña ya está por las nubes en la ciudad olívica. Para el puente de la Constitución, por ejemplo, roza el 98 %, según algunas centrales de reservas, como Booking.

Muchos hoteles y pensiones viguesas están llenas para estas fechas y los que todavía cuentan con habitaciones disponibles las ofrecen a precios que superan los 150 euros por noche. Un ejemplo que llamó la atención de este periódico: dos noches (del 6 al 8 de diciembre) sin desayuno en un hostal de dos estrellas, al que sitúan a 850 metros del centro de la ciudad, 500 euros. La citada página turística disponía ayer de camas en solo un establecimiento de cuatro estrellas para este puente festivo: 420 euros las dos noches.

Mientras tanto, en Santiago todavía quedan plazas libres en la inmensa mayoría de los establecimientos que ofrece Booking, a precios relativamente acordes a las diferentes categorías. Con todo, la intención del gobierno local compostelano es que la actividad comercial gane fuerza con una ciudad mejor decorada y en la que el objetivo es que se respire ambiente navideño. La recuperación de un Belén de tamaño natural para la plaza del Obradoiro es otra de las decisiones del equipo de Bugallo.