Sogama aparta de los procesos de adjudicación de la empresa a los trabajadores imputados
El PSdeG pide a la Xunta que explique por qué fue readmitido Pérez Mariño, despedido con el Bipartito
Santiago. Los dos trabajadores de la empresa pública Sogama imputados por un presunto delito de tráfico de influencias serán retirados temporalmente de los procesos de adjudicación de la entidad para que "el nombre de la sociedad quede absolutamente fuera de ninguna duda". Así lo anunció ayer el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, que, al igual que el presidente de Sogama, Luis Lamas Novo, aclaró que uno de los imputados ya no tenía participación en adjudicaciones y la implicación del otro era "mínima". Tanto Hernández como Lamas insistieron en la presunción de inocencia, aclarando que la medida se toma por razones de "cautela y celo".
Lamas Novo indicó asimismo que los informes jurídicos solicitados por Sogama a dos bufetes de abogados en relación a este proceso apuntaron la ausencia de irregularidades y recordó que el procedimiento "viene de hace tres años". En octubre de 2008 la investigación de un supuesto delito medioambiental por los vertidos sobre el río Lengüelle detectó posibles irregularidades en las adjudicaciones, lo que originó que se abriera una pieza separada en el proceso judicial, en la que han resultado imputados Ángel Javier Costal y Ramón Pérez Mariño.
Sogama insistió también e en que la empresa colabora en la investigación y aclaró que "as dúas persoas imputadas por parte desta empresa non son nin foron en ningún momento altos cargos nin directivos, senón que ocupan as prazas gañadas no marco do correspondente concurso-oposición".
Mientras CCOO insistía ayer en el derecho a la presunción de inocencia de los dos trabajadores, el PSdeG exigía su inmediata destitución, ya que, "aínda preservando o seu dereito á presunción de inocencia, e mentres continúa a investigación, non deben seguir ocupándose das actividades polas que están sendo procesados".
La secretaria de Medio Ambiente del PSdeG, Carmen Gallego, apuntó que Pérez Mariño había sido despedido en la anterior legislatura tras detectar graves irregularidades en el desempeño de sus funciones, y pidió al actual conselleiro explicaciones de "por que promoveu un cambio nos servizos xurídicos que defendían a Sogama, que derivou na indefensión da sociedade e facilitou a súa readmisión"