Un Compos diezmado, ko

Lo que sí no esperábamos es que los futbolistas se tirasen del barco antes de tiempo y, mucho más, cuando tuvieron oportunidades a lo largo de la temporada para abandonar el equipo santiagués. El comportamiento de Sestelo, y Centrón se merece una respuesta inmediata por parte de los dirigentes. No es de personas dar la espantada por respuesta. Bien pudieron comunicárselo al entrenador y que éste obrase en consecuencia.

Así las cosas, se tuvo que recurrir a los juveniles para completar de urgencia la lista de convocados, teniendo en cuenta que Trovo y Keaton estaban lesionados, o que Mariño y Rubén (sancionados) no podían jugar ante el Athletic B, la presencia de los escaqueados es incalificable. Y entendemos su malestar por que el club les adeuda cinco mensualidades, pero uno entiende que e la vida hay que ir siempre de frente.

Del encuentro, poco hay que contar. Con un equipo ya descendido a Tercera y otro que necesitaba ganar en San Lázaro para salvarse, lo lógico es que viésemos a un jovencísimo equipo vasco dejándose la piel en el terreno de juego. No fue así. Lo único que hizo fue desplegarse por el campo y esperar a que los santiagueses cayesen por cansancio sabedores de que llevan cuatro semanas sin entrenar a causa de la huelga montada por los impagos de las nóminas.

La suerte se alió con el conjunto que dirige De la Fuente y en el minuto 13 se encontró con un gol con polémica. Los locales reclamaron falta al portero Alberto, pero el árbitro no lo entendió así. Al contrario, terminó mostrándole la amarilla por las protestas.

Con el marcador en ventaja, los rojiblanco sólo tuvieron que estar pendientes de que el Compos no los sorprendiera. Y lo consiguieron porque ayer el once de la SD no estaba para muchas hazañas.

UN PARTIDO PARA OLVIDAR Los pocos aficionados que acudieron a San Lázaro se aburrieron y no encontraron mejor diversión que recriminar la actuación del colegiado. Razón no les faltó. Ayer se pudo comprobar lo fácil que es arbitrarle a un equipo ya descendido y que en las gradas no tenía ni 300 seguidores que pudiesen meter presión. El madrileño López Puerta tuvo dos varas de medir y el Compos fue perjudicado.

La segunda parte, no mejoró el soporífero encuentro de los primeros cuarenta y cinco minutos. Al Athletic con el gol le valía y como los santiagueses tampoco les ponían en apuros se dejaron llevar. El segundo tanto llegó de una falta botada desde la banda derecha, aunque el capitán Iñígo Pérez la sacó con la izquierda. Visto para sentencia. Fabiano premió a los juveniles con unos minutos y todo acabó como empezó. Mal.

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