Los vecinos de Portosín reclaman el derribo del muro de A Richoliña
El camino presenta usos agrícolas, turísticos y de paso de agua con tuberías
Cerca de 90 vecinos se manifestaron ayer en protesta para el derribo del muro de A Richoliña. "Si de aquí al 30 de agosto el muro no se ha destruido, los vecinos procederemos al derribo del muro", manifestó una de las vecinas demandantes, Concepción Lavid.
Los vecinos se mostraron "indignados" ante el cierre del camino con un muro ya que, en palabras de Concepción, "el paso tiene vestigios por uso además de ser un lugar tradicionalmente agrícola". Añadió que "es una ruta turística a los molinos y un acceso al carballal de la zona".
Señalaba Lavid, que uno de los problemas del rural gallego es que " el 90% de los caminos rurales no se han ocupado de inventariarlos". Destacaba además que por la ley está contemplado un "uso público" por lo que todos aquellos tienen "derecho a transitarlo". Otra de las opciones en caso de que no se lleve a cabo el derribo es la expropiación del camino. "Los dueños tendrían que aportar una documentación que no tienen", puntualizó.
Hay que indicar que el camino tiene un total 800 metros, con 200 de ellos asfaltados.