Expulsada hace 12 años

La Liga Árabe recibe a la Siria de Asad con una cálida bienvenida

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha llegado este viernes a Arabia Saudí para dirigirse a los líderes árabes, la mayoría de los cuales se han mantenido neutrales sobre la invasión rusa

El presidente de Siria, Bashar el Asad, durante la cumbre de la Liga Árabe, este viernes en Jedah.

El presidente de Siria, Bashar el Asad, durante la cumbre de la Liga Árabe, este viernes en Jedah. / AFP PHOTO / HO / SPA

Andrea López-Tomàs

La cumbre de este año de la Liga Árabe ha sido la más excepcional en años. No sólo ha sido la primera que ha contado con la presencia del rehabilitado dictador sirio, Bashar el Asad, tras más de una década de aislamiento, sino que también ha acogido a un invitado sorpresa. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha llegado este viernes a Arabia Saudí para dirigirse a los líderes árabes, la mayoría de los cuales se han mantenido neutrales sobre la invasión rusa y tienen fuertes vínculos con Moscú. Durante la cita regional, los mandatarios árabes han discutido sobre la situación en Siria, el conflicto en Sudán y los avances de Arabia Saudí en materia diplomática. 

Esta extraña presencia de dos líderes antagonistas en su relación con Rusia –la intervención de Moscú en la guerra civil siria afianzó a Asad en el poder– tiene firma saudí. Después de retomar las relaciones con su archienemigo Irán gracias a la mediación china, el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salmán lidera los avances diplomáticos en la región. Mientras se aleja de Estados Unidos, el conocido popularmente como MBS busca un acercamiento regional y un mayor rol en los cambios en el mundo árabe. El dictador sirio fue recibido en el aeropuerto con sonrisas y apretones de manos amistosos por parte de las autoridades saudís un día antes de la cumbre que ha reunido a los 22 países árabes.

El príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán, saluda al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.

El príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán, saluda al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. / AFP PHOTO / HO / SPA

"Oportunidad histórica"

Durante su discurso frente a los líderes que algún día le rechazaron, Asad ha calificado la cumbre de "oportunidad histórica" para abordar las crisis en la región. "Espero que marque el comienzo de una nueva fase de acción árabe por la solidaridad entre nosotros, por la paz en nuestra región, el desarrollo y la prosperidad en lugar de la guerra y la destrucción", ha añadido. Mientras el autor de la masacre, la persecución y el desplazamiento de su pueblo durante 12 años de guerra civil hablaba, cientos de personas han salido a protestar en el norte de Siria controlado por los rebeldes contra su participación en la reunión regional.

"Es importante dejar los asuntos internos a la gente del país, ya que ellos son los que mejor pueden manejar sus propios asuntos", ha insistido el mismo Asad que, sin la ayuda de sus aliados en Moscú y Teherán, no habría podido recuperar gran parte del territorio. Con estas palabras, Asad da carpetazo a los años de aislamiento tras recorrer la alfombra roja. La cumbre ha tenido lugar en Jeddah, una ciudad portuaria de Arabia Saudí. El anfitrión fue uno de los principales patrocinadores de los grupos armados de oposición que querían derrocar a Asad. Ahora, el dictador ha sido recibido con todos los honores. 

Líderes autoritarios

Arabia Saudí y el resto de países árabes se alejan así de las posiciones más aceptadas por Occidente. Estados Unidos ha criticado repetidas veces la rehabilitación de Asad en la región y su aceptación en la Liga Árabe, pero no parece que su opinión haya importado mucho. "La Liga Árabe está muy agradecida con el régimen de Asad por enseñarle a todo el pueblo árabe una lección de que si protestas pacíficamente por la libertad y la democracia contra un régimen dictatorial, serás asesinado, torturado, bombardeado y el régimen que lo hizo será recompensado, así que ni te molestes en intentarlo", ha tuiteado la siria-canadiense Celine Kasem del Grupo de Trabajo de Emergencia Sirio.

Precisamente durante esta jornada histórica, a Asad le han sonreído y saludado otros líderes autoritarios que mantienen a su población con mano de hierro. A la 32º cumbre de la Liga Árabe, han asistido el presidente egipcio, Abdelfatá el Sisi; su homólogo palestino, Mahmud Abás; el rey Hamad de Bahréin, el primer ministro libanés, Najib Mikati; el presidente de Túnez, Kais Saïed, y evidentemente el príncipe heredero saudí, MBS, entre otros. Todos cuentan con su propio interés en retomar el diálogo con Asad, en concreto para deshacerse de los refugiados sirios presentes en su territorio o para acabar con las redes de tráfico de drogas, sobretodo de Captagon, originadas en territorio sirio.