Pan Cervela cumple 75 años con la mezcla de tradición e innovación

Cuando en el año 1946 el matrimonio formado por Manuel Cervela Loureiro y María del Carmen Zamar fundaban una pequeña panadería en la aldea estradense de Matalobos no se podían imaginar que estaban construyendo el futuro de sus tres hijos y los cimientos de una empresa muy apreciada por todos los clientes y que, 75 años después, agrupa a ciencuenta trabajadores y cuenta con ocho despachos abiertos en A Estrada, Cuntis, Santiago, Caldas de Reis y también Moraña.

Poco tardarían en trasladarse al centro urbano de A Estrada para ocupar desde 1951 un despacho en la avenida de Pontevedra, que todavía existe hoy en día.

Fue 45 años después de su fundación, en el año 1991, cuando la empresa sufrió cambios importantes a consecuencia del fallecimiento de los dos padres de familia.

Benigno, José Manuel y Luis, tres de los hijos de Manuel y María del Carmen, toman las riendas de Pan Cervela y el primer cambio que acuerdan es la transformación de la forma social de la empresa, constituyéndola en ese mismo año como una comunidad de bienes. Apenas 4 temporadas después pasa a ser Sociedad Limitada y comienza a experimentar la expansión de la panadería hasta alcanzar un hito decisivo en 1998 con la apertura de un nuevo punto de venta fuera de A Estrada, concretamente en el Centro Comercial Compostela (Hipercor).

Sus productos pronto adquirieron buena fama con repercusión en las ventas, lo que empujó a los hermanos Cervela Zamar a construir en 1999 unas nuevas instalaciones para el horno, en la misma avenida de Pontevedra, aunque esta vez en el número 101. Fue ese el año más decisivo en el proceso de expansión, ya que deciden apostar por la creación de más despachos y se inaugura un nuevo establecimiento, esta vez con cafetería, en el centro estradense, concretamente en la avenida de Calvo Sotelo.

Su crecimiento era imparable hasta el punto de que en 2001 absorbe una pequeña panadería de Cuntis integrando a su gerente en la plantilla de Pan Cervela y establece un nuevo punto de venta en esa localidad. Y las aperturas se sucederían: en el año 2005 en la compostelana avenida de Vilagarcía y en el centro comercial Supercor de O Milladoiro, y en 2008 en el centro de Caldas de Reis y más tarde en Moraña.

Poco a poco fue ampliando su radio de acción gracias a la calidad de sus productos. En la actualidad cuenta con más de 40 variedades de panes y especialidades y el 85 % de su producción es artesana.

Los hermanos Cervela no quieren abandonar su espíritu artesano, aquel que le dio buen nombre. Destacan sus empanadas de maíz, que son un referente en toda la comarca y de lo más demandado por su clientela.

Pero no cierran su mente a las novedades como el pan de nueces, multicereales, baguettes, bagueittinas, chapata y panes especiales para celiacos.

Se aproxima ahora una fecha importante para Pan Cervela ya que con motivo del Día de Reyes elabora 4.000 roscones. Porque en pastelería pueden presumir de dar sabor a cualquier sobremesa con sus bicas, los melindres, las roscas en Pascua, los huevos de chocolate, las monas de Pascua, las orejas y las filloas de Carnaval, las chulas, los mazapanes y los huesos de santo.

Pasaron 75 años de la apertura de aquella pequeña panadería en Matalobos, pero Pan Cervela sigue teniendo como finalidad elaborar productos artesanos, aunque sin renunciar a la innovación en el campo de la panadería y la repostería. Son buenos ingredientes para vivir, al menos, 75 años más.