Oroso rompe con la pana poblacional y casi duplicó su censo en treinta años

Oroso. Duplicar la población en apenas treinta años no es moco de pavo para un municipio del entorno compostelano, como es el de Oroso. Y así lo subraya el Concello, recordando además que fue uno de los cinco ayuntamientos gallegos que terminó 2020 con crecimiento vegetativo positivo (más nacimientos que defunciones), algo que no se estila demasiado en este país, y menos en plena pandemia.

Así, la evolución del padrón poblacional orosano pasó de los 3.700 habitantes censados en 1990 a 5.200 en el año 2000, cifra que se eleva hasta los 7.500 residentes actuales, lo que supone un incremento superior al 40 por ciento. Pero es que aún hay más, porque si se tienen en cuenta a las personas que viven de forma habitual en el término, pero están censadas fuera, se elevaría hasta las 9.000 almas a partir de los consumos de agua o basura.

“Son varios os motivos que explican esta tendencia al alza, pero estamos orgullosos de ver como a nosa aposta por uns servizos públicos de calidade reflíctese no interese de moitas familias e particulares por vivir en Oroso”, explica el alcalde, Luis Rey. Destaca la existencia de tres escuelas infantiles para evitar las listas de espera y desplazamiento. También recuerda que el Concello de Oroso está bien comunicado por carretera, cerca de Santiago y con dos accesos a la autopista, sin olvidar el alto número de empresas (en el polígono trabajan 2.000 personas) y que “temos un bo centro de saúde”, así como buena oferta cultural y deportiva. m. o.