Cristianos, derechas e izquierdas

¿CUÁL ES EL PARTIDO POLÍTICO más cercano al cristianismo? Si se escuchan los informativos o a los tertulianos de los medios de comunicación pertenecientes a la conferencia episcopal española, se diría que el PP o Vox. Sin embargo, algunos cristianos son críticos con estos medios por su parcialidad política y creen que no siempre está en línea con los criterios evangélicos

Cuenta un profesor de Religión que una vez le preguntaron en clase a qué partido votaría hoy Jesús. Su reacción fue devolver la pregunta. La respuesta más amplia de la clase fue Vox. Como la razón era porque defiende a la Iglesia, preguntó: ¿Pensáis que este partido sigue las líneas de acogida a los menos favorecidos, como son los inmigrantes, a integrar a los disminuidos y más pobres de la sociedad y buscar el diálogo como herramienta indispensable para la solución de conflictos, tal como propugna el papa Francisco? El silencio se hizo en clase. Sin embargo, ¿se podría acaso argumentar que Jesús votaría a alguno de esos partidos de izquierda en que bastantes de sus miembros arremeten contra la religión y la fe de sus fieles?

Esta es la cuestión: la derecha no acompaña planteamientos evangélicos ni el espíritu del Concilio Vaticano II y parte de la izquierda lucha contra la supervivencia del hombre religioso, de la Iglesia y de todo lo espiritual. Por supuesto que hay muchos matices a estas posiciones tanto en la derecha como en la izquierda, pero no es menos cierto que las dos posiciones que señalamos aparecen claramente en los dos lados de la política.

Las ideologías de derechas defienden radicalmente las tradiciones que necesitan a Dios como garante de la armonía y del orden, así como de una determinada moral y de una jerarquía del poder. Por otra parte, los partidos de izquierda asumen actuaciones sociales más integradoras, así como una mayor preocupación ecológica, sin embargo, no evolucionan ni en su pensamiento ni en sus políticas sobre la experiencia religiosa y no son capaces de integrar retos y actuaciones que los cristianos llevan haciendo desde hace mucho tiempo, llevando su labor social a donde las administraciones no llegan.

Los cristianos tienen como principal mensaje la Universalidad del Amor que se traduce en que lo afectivo es lo más importante para las personas. En un mundo en que impera el culto a la apariencia, al prestigio, al quedar bien, al cuerpo, al dinero, al ocupar los primeros puestos académicos, políticos o económicos, es importante señalar que por encima de estos ídolos falsos, lo afectivo es lo más importante y esto significa cuidarnos unos a otros, a nosotros mismos y a la naturaleza, poniendo especial atención a los que necesitan más cuidado, como son los marginados, los pobres, los deprimidos, los que están solos y aislados…

Cada cuál debe pensar qué partido se acerca más a estas prácticas. El papa Francisco en sus escritos y declaraciones ha indicado pautas y una senda que debía ser tenida en cuenta por derechas e izquierdas. Es una senda humana y solidaria que da esperanza al mundo en tiempos convulsos.