El consumo que nos dejará la covid

DURO IMPACTO es el que leemos hoy en nuestras páginas sobre dos sectores fundamentales para nuestra economía, uno ligado al ocio y tiempo libre, el de las agencias de viajes, otro, el de los concesionarios de la automoción, donde al clásico eslogan aquel de “¿te gusta conducir?” sumamos la importancia de un transporte que también ha resultado dramáticamente contagiado por la pandemia de la covid-19. Todo va a cambiar tras el coronavirus, no solo la forma que teníamos de ver el mundo o lo seguros que nos creíamos. Quien hoy nos tiene que vender un viaje, como es el caso de las agencias que representa Juan Rivadulla, han sufrido directamente por las restricciones que limitan los movimientos, por el adiós a los viajes del Imserso, por la evaporación de los vuelos en todos los aeropuertos. Muchos se han pasado al teletrabajo, otros cierran. Llegan los primeros despidos mientras hay ERTE a mansalva. También está ocurriendo algo similar en los puntos de venta del motor: se exprimen las ayudas públicas, se va a coches utilitarios, que consuman menos y sean más asequibles. Pero las cifras de matriculaciones siguen cayendo. Cambia nuestra forma de viajar, nuestra movilidad, y la covid sólo ha venido a acelerar unos años algo que se iba a producir. Hasta a la prensa no nos queda otra que adaptarnos a un consumidor que cada vez será más digital. Sí o sí.