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Reseña Musical

“Arte de piano”, alumnos de Ilona Timchenko, en el Paraninfo da Universidade

    Concierto de selectos alumnos de la profesora Ilona Timchenko, en el Paraninfo da Universidade-20´30 h.-, con el reclamo de “Arte de piano”, una muestra del nivel conseguido en un período de estudios con la maestra y que cada cierto tiempo, ofrecen el grado de evolución en sus estudios. Alina Madison Sadykova, propone una descarga de puro nervio a través de la “Rapsodia húngara nº 10 “, de Ferenz Liszt, conjunto de obras zigzagueantes en los pretendidos zingarismos y que en esta ocasión, con la Rapsodia en Mi M., nos encontramos con un motivo ligero en el “Andante deciso”, puestos en ambiente, para deslizarse hacia un ”Allegro capriccioso” que nos traslada a un episodio en “glissandi”, en el que el motivo tras una breve repetición del tema “Allegretto”, forma una “strette” breve, pero de suma exigencia virtuosística. Piezas que según querencias imaginables, no pudieron resistir la tentación de imaginativas orquestaciones, algunas claramente ostentosas cara al común de los aficionados dispuestos a entregarse sin remilgos.

    Dasha Rosiinsky Prokopenko, puro destilado musical por su procedencia familiar, se decanta por el Chopin del “Estudio nº 2, del Op. 25”, grupo de 12 obras compuestas entre 1832/ 36, una pieza que se anuncia en Fa m., tonalidad relativa del precedente, en La b M. La pretensión didáctica de este popular estudio, está destinada a una definida función didáctica, con la intención de dotar de agilidad y ligereza a las exigencias digitales de la mano derecha, además de estimular la independencia rítmica de esta con respecto a la izquierda. La ambivalencia entre los ritmos binario y ternario, resulta una traba relativamente fácil de superar por parte de los estudiantes dotados. Para agudos estudiosos, este “Estudio en Fa m.”, aparece como una elaboración de una imaginable improvisación, realizada durante un recital parisino, en la primavera de 1834.

    Miguel Montes Cal, se centrará en los rigores canónicos de la “Partita nº 2, en Do m. BWV 826”, de Johann Sebastian Bach, tomando una selección, de esta composición del período de Leipzig, en 1727, y que en su conjunto tiene seis movimientos, concluyendo con un “Capriccio”, en sustitución de la habitual “Giga”, movimiento brillante para mayor gloria del autor, Otros movimientos que caracterizan la obra, con la “Sinfonia”, en tres partes y en 4/4; una “Allemanda”, que se desarrolla con una ostensible placidez; la “Courante”, una decisión del autor, por decidirse por el estilo a la francesa, en una escritura más compleja; la Zarabanda”, profusamente expresiva y en las cercanías de un aria y el “Rondó”, un tiempo de mayor envergadura, idea de lo que supone una “Partita” más polifónica que el resto.

    Michelle Pena, de nuevo con Chopin, esta vez con la “Balada nº 2, Op. 38”,obra que vio la luz en la Salle Pleyel parisina, en 1941, en ejecución del autor y sobre la que había trabajado desde cinco años antes, antes de concluirse en el conocido reposo junto a George Sand, en la Cartuja de Valldemosa, una dedicatoria a su apreciado Robert Schumann quien previamente le había obsequiado con la “Kreisleriana Op. 16”. Obra intensa y arrebatada, plena a agudos contrastes que no disimulan el estado emocional del franco-polaco. Partiendo de una sección introductoria de carácter apacible, nadie podría sospechar el arrebato con el que irrumpe el episodio inmediato, que resulta un Presto con fuoco”, que marcará la trayectoria de la obra.

    Alonso Pinilla Villamor, se decide por el Allegro” de la “Sonata Op. 10 nº 2, en Fa M.”, de L.v Beethoven, obra que con respecto a la anterior de este grupo de tres sonatas, parece querer aportar una especie de equilibrada compensación, abriéndose paso con una variedad de acentos desconocidos, en un generoso fluctuar de imágenes y fantasiosas sorpresas. Una sonata que carece de tiempo lento, quedándose en tres que partiendo del “Allegro”, pasa por un “Allegretto” para concluir en un “Presto”. El Allegro” resultará una invitación para el oyente en forma de cordial saludo, en un estado claramente de buen humor.

    Yuri Durán Castro, nos ofrecerá el “Allegro assai” de la “Sonata, en Fa m. Op. 57” (Apasionata), de L.v Beethoven, movimiento que para el estudioso Boucourechliev, dentro de su clima dramático, la obra aparece elaborada también desde el ángulo “físico” de los sonidos, ya que en el movimiento, el timbre se convierte en una auténtica función musical, en una línea de fuerza tan importante como las demás. R. Rolland dirá que la “Apasionata” puede ocupar un lugar entre un fresco de la Capilla Sixtina y una tragedia de Corneille; pertenece a la misma familia. Es el desencadenamiento de las fuerzas elementales, de las pasiones, de la locura de los hombres y de los elementos. El estreno de la sonata tuvo lugar en Viena, cuando el autor frisaba los mediados de su treintena.

    Marina Fernández Rueda, también se centrará en Ferenz Liszt, en la última pieza de los “Tres estudios de concierto” (Caprichos poéticos), es decir, el que lleva por título “Un sospiro”, un tríptico de 1848, un año particularmente intenso, aunque hablar de eso en el compositor pueda resultar un tanto gratuito, ya que de su vida, se acepta que casi no concedió tiempo al reposo. “Un sospiro”, es una pieza en Re b Mayor. Comenzando por una melodía que se reparte entre las dos manos, previo a una cascada de arpegios que ilustran el carácter de la misma. El tema “suspirado”, en realidad armonizado, acaba quebrándose con una cadencia virtuosística, que la traslada al registro medio de la mayor exuberancia.

    Martín Manuel Chaves nos acerca también al Liszt de la “Rapsodia húngara nº 2, el Do sost m.”, el grupo de piezas que han tentado arreglos orquestales de segura aceptación y algunos precisamente realizados por el propio compositor, de los que la posteridad dará excelente respuesta como comprobamos regularmente en conciertos. La rapsodia que nos interesa, responde a la celebridad conseguida entre intérpretes y aficionados. Influye de manera ostensible la entrada da actitud majestuosa que engancha desde los primeros acordes pero similar respuesta se recibe inmediatamente por el motivo musical de un “Lassan”, sobre un peculiar motivo de danza que se acrecienta progresivamente antes de rendirse a una “Friska” que da cauce a la continuación-

    30 nov 2021 / 01:00
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