Santiago
+15° C
Actualizado
sábado, 10 febrero 2024
18:07
h

¿Cómo afrontar la covid en este otoño-invierno?

SI bien es cierto que la evolución de la pandemia está experimentando un descenso de las muertes notificadas en todo el mundo, no es menos cierto que las subvariantes de ómicron son más transmisibles que las anteriores. La sopa de letras y números de las subvariantes de ómicron sigue creciendo y no se puede descartar que surjan nuevas variantes aún más transmisibles y más peligrosas. En la actualidad, las subvariantes BA.2.75.2 y la BQ.1.1. son las más preocupantes, ya que pueden eludir la protección de las vacunas actuales.

La BA.2.3.20, podría ser peor ya que tiene muchas mutaciones, si bien de momento no se ha caracterizado su escape inmunológico; y la XBB está en estudio
y en observación. Que tengamos que convivir con la covid-19 no significa que la pandemia haya terminado y no ayuda el hecho de que los gobernantes (no todos) hagan oídos sordos a las advertencias y recomendaciones de la comunidad científica y de los expertos, ya que el virus sigue circulando por Europa y el resto del mundo.

Recientemente, la Comisión Europea, hizo un llamamiento a los Estados miembros para que se preparen con la finalidad de mantener el virus bajo control y evitar nuevas infecciones y un aumento de casos en la temporada de otoño-invierno. En España, lo previsible es que empiecen a subir los contagios e ingresos por covid-19 como ya está ocurriendo en Europa (Austria, Alemania, Francia, Italia). Van a influir una concausa de factores: la climatología (las bajas temperaturas, el frío, la humedad), el hecho de que la gente a partir de ahora vaya a desarrollar su actividad laboral y vida familiar mucho más en interiores (locales con escasa o nula ventilación y sin mascarilla) que en los meses de verano; la caída de la protección de las vacunas, etc.

Con este escenario, lo previsible es la llegada de la 8ª ola, que podría coincidir con la de gripe estacional. Lo lógico es
que aumenten considerablemente los
contagios, las hospitalizaciones y las muertes por covid-19.

España, con una incidencia acumulada de 168 casos por 100.000 hab. a los 14 días, 2.716 pacientes hospitalizados por covid, 129 en UCIs, de momento está conteniendo la situación, al igual que el Reino Unido. El hecho de no contabilizar correctamente los casos (salvo los mayores de 60 años), la falta de realización de test (el uso de test ha caído en picado) y pruebas diagnósticas, nos impide ver la auténtica realidad del problema. El dato objetivo es el número de muertos. Sirva como ejemplo: Asturias rebasa los mil muertos por covid-19 en lo que va del 2022, ya supera el total de fallecidos en 2021.

Teniendo en cuenta que con el paso del tiempo caen los Ac y disminuye la protección de las vacunas, es importante avanzar en la administración de la 4ª dosis a los mayores de 60 años (12 mi-llones de personas) y muy especialmente en las personas más vulnerables y
de riesgo (inmunodeprimidos, etc.). No podemos olvidarnos de los 15 millones de personas que todavía no han recibi-do la 3ª dosis, porque han decidido no vacunarse por distintas razones, que respeto, pero no comparto (hay que pensar en los demás).

Aquellos que quieren seguir asemejando el covid-19 a una gripe se equivocan, ya que la mortalidad por covid-19 es cinco veces mayor que la de la gripe. De ahí la importancia de aumentar la vigilancia y el control, y estar preparados para afrontar la 8ª ola y con ello minimizar al máximo su impacto. Se deberían hacer más test diagnósticos, recuperar el uso de la mascarilla en interiores y en aglomeraciones cuando no se pueda mantener la distancia de seguridad.

Un poco de sentidiño no vendría mal, si hacemos bien los deberes en los
próximos meses, será más fácil que llegue el final tan deseado de esta pandemia en el venidero año 2023. Espere-mos que así sea.

18 oct 2022 / 01:00
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
Tema marcado como favorito