Santiago
+15° C
Actualizado
martes, 23 abril 2024
16:11
h

Contaminación versus salud

LA SALUD PLANETARIA en general y la de las grandes ciudades en particular están en peligro, como consecuencia de la sobreexplotación de los recursos naturales y la desmedida actividad antropogénica (industrial, transporte, calefacciones domésticas, etc.), que ha tenido lugar en las últimas décadas, con consecuencias muy negativas sobre la economía y la sociedad en su conjunto, si bien hay que destacar sus efectos sobre la salud (EPOC, cáncer de pulmón, enfermedades cardiovasculares, infartos, etc.). Un informe reciente de The Lancet, destaca que cada año se producen 9 millones de muertes prematuras en todo el mundo (una de cada seis) causadas por la contaminación del aire, agua, tierra, lugar de trabajo; siendo el uso de combustibles fósiles la fuente principal que origina gran parte de esa contaminación, que afecta a la salud ambiental del planeta y a la salud de sus habitantes.

Siempre he defendido que la contaminación atmosférica y el calentamiento global son las dos caras de una misma moneda, ambos problemas tienen un denominador común: la contaminación de origen antropogénico; por lo que urge actuar y que los gobiernos destinen más recursos para luchar contra la contaminación en las grandes urbes y construir ciudades más saludables y sostenibles, disminuyendo considerablemente las emisiones de contaminantes a la atmósfera procedentes de fuentes fijas (industrias y calefacciones domésticas) y fuentes móviles (transporte), con lo cual lograremos a su vez reducir considerablemente las emisiones de GEI a la atmósfera, precursores del calentamiento global; todo ello conlleva impulsar y acelerar la transición energética hacia las energías renovables (limpias, no contaminantes) y promover la movilidad sostenible (transporte público, coche eléctrico, carriles bici, etc.), con la finalidad de mejorar necesariamente la calidad del aire urbano y con ello la calidad de vida y la salud de la población, además de contribuir a mitigar los efectos del calentamiento global (estamos ante una emergencia climática que no puede esperar).

Con la crisis ambiental, energética y económica (al dispararse los precios de los combustibles fósiles) que estamos atravesando, hay razones más que suficientes para afrontar la grave situación actual con responsabilidad y apostar claramente por las energías renovables y la movilidad sostenible (coche eléctrico especialmente), la economía circular, las tecnologías de saneamiento y los instrumentos de gestión ambiental; piezas clave todas ellas para luchar contra la contaminación ambiental. La industria automovilística se ha visto especialmente afectada a causa de la pandemia y del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, de ahí la escasez de chips y semiconductores, y que las fábricas no puedan atender la actual demanda y haya que esperar un año para disponer de un coche eléctrico; a pesar de ello, todo parece indicar que el mercado de coches eléctricos quiere despuntar en el 2022, a pesar de su excesivo coste, la escasa cuantía de las ayudas y la lentitud en su tramitación, disponer de una red de cargadores totalmente insuficiente en España y en Galicia, y la escasa oferta que hay por parte de los concesionarios de automóviles y de las marcas, con el agravante de que los precios se han disparado.

Algunas compañías petroleras y gasistas no están por la labor de apoyar la transición energética, más bien todo lo contrario, torpedear y/o ralentizar el proceso, ya que lo que se les viene encima pone en tela de juicio su negocio y perjudica sus intereses económicos. Por todo ello alzo mi voz para pedir a los gobernantes un mayor nivel de compromiso con la sostenibilidad futura del planeta. La celebración del Día Mundial del Medio Ambiente (5 de junio) no puede ser un postureo, es preciso trabajar duramente los 365 días del año a favor de la salud ambiental del planeta y la igual dignidad de todos los seres humanos.

06 jun 2022 / 01:00
  • Ver comentarios
Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
Tema marcado como favorito