¿Efecto dominó?

CONTINUIDAD. Hay que tocar muy pocas cosas en un engranaje que funciona a la perfección. Es de perogrullo. La maquinaria del PPdeG está perfectamente engrasada y solo chirría en la parte donde se ajustan los piñones que mueven las principales ciudades. Una vez que se tomó la decisión de que la cúpula autonómica, liderada por Alberto Núñez Feijóo con Miguel Tellado de lugarteniente, el efecto dominó está provocando movimientos continuistas.

Éste lunes, por un lado, Diego Calvo presentó sus 2.025 avales para seguir al frente del partido en la provincia de A Coruña. En Ourense fue Manuel Baltar el que hizo otro tanto, pero como al barón le gustan mucho los gestos decidió aportar 4.202, que vienen a ser uno por cada día desde que sucedió al frente del PP a su padre, José Luis Baltar.

Elena Candia en Lugo no tendrá ningún problema para presentarlos, tiene hasta el día 4, tras haber recibido el apoyo unánime del Comité Provincial; hace cinco años fue elegida tras duplicar el número de avales de su rival que era la favorita al contar con el apoyo de Feijóo. Ahora no hay dudas.

Tampoco se vislumbra oposición que cuestione a un cada vez más fortalecido Alfonso Rueda en su intención de seguir liderando al PP en Pontevedra y la única duda es si entra en la carrera de sumar papeletas con su nombre o se limitará a cubrir el expediente.

El primer reto de todos es buscar la fórmula que, de cara a las municipales, permita ajustar esos piñones urbanitas que está distorsionando un engranaje que tan buen rendimiento aporta cuando se trata de autonómicas. Y, de paso, darle una alegría a un boss, acostumbrado a las mayorías. aNTÓN TRABANCA