Santiago
+15° C
Actualizado
martes, 23 abril 2024
16:11
h

“Favola d´Argo”, en San Paio de Antealtares para cerrar “Espazos Sonoros”

    Repetimos en San Paio de Antealtares- 20´30 h.-, esta vez con el trío “Favola d´Argo” y su programa “Monialibus est necessaria musica”, siendo ellos la soprano Rosana Orsini, la arpista barroca Veronica Febbi y el organista Marco Aurélio Brescia. Atención preferente a la tradición de herencia portugesa, partiendo de transcripciones del antiguo Real Mosteiro de Sâo Benito da Avéiro do Porto. Quedémonos también con una “Xácara de Iº ton” de Bartolomé de Olagüe, revisado ampliamente por Andrés Díaz, desde los fondos del “Libro de Cyfra adonde se contem varios Jogos de Versos de Obras, e outras curiosidades de varios autores”, que se encuentra en Oporto y los hallazgos que se conservan en el Mosterio de Sobrado dos Monxes. Igualmente, y de Girolamo Sartori, músico parmesano y que ejerció en Pamplona, “Manum suam misis hostis” (Lección III in feria quarta, para añadir la “Sonata en Re M.”, de quien fuera m.c. de la Catedral compostelana Melchor López, del que se aceptaba que dispuso de la mejor capilla que el templo nunca había tenido, funcionando como una escuela de música que él mismo contribuyó a prestigiar y que era vivo modelo de aquella herencia de F.J. Haydn al que admiraba desde años de juventud.

    Marco Aurélio Brescia, había dedicado una de las jornadas de “Espazos Sonoros” de 2014, al propio Melchor López-Arredor do libro de órgano de Melchor López (1781)-, en la Igrexia de Iria Flavia (Padrón), importante antología de obras para el instrumento recopiladas por el maestro y sobre aquel instrumento del que había sido su artífice Miguel de la Viña, para ser reconstruido posteriormente por Manuel Sanz y Gregorio Fernández en 1777, los autores del órgano de Iria Flavia. Brescia, doctorado en la Universidad de la Sorbona, había realizado su tesis sobre la organería en Galicia y Portugal.

    Para el sello “Arkhé Music”, Rosana Orsini y Brescia habían registrado su trabajo “Ángeles y Sirenas”, con música religiosa de Oporto y Santiago de Compostela, utilizando el órgano histórico de Manuel de la Villa y Ramón de Cardama del Convento de Sta Clara, de Santiago. No solo sobre un repertorio coetáneo, sino también el nacido en un contexto religioso común a esas ciudades, producto afortunado de un profundo trabajo de larga investigación. En esencia, obras de Antonio da Silva Leite- hoy especial protagonista en San Paio-, y de los Conventos de Oporto; también Melchor López, y las del primero, se caracterizaban por haber sido un encargo de las clarisas y benedictinas de Oporto, presentando como aspecto destacado, pasajes de coloratura y de un virtuosismo de sobresaliente brillantez. Se decía que el propio canto de las monjas, emulaba el canto irresistible de las sirenas, que supondría un irresistible atractivo para devotos y entusiastas aficionados a la música en su grado más sublime.

    Rosana Orsini, realizó un master en Canto Lírico, en la Manhattan School of Music neoyorquina y un Posgrado en canto en la Royal Accademie of Music, de Londres y con Antonio Florio, dedicado a la interpretación de la música antigua, especializándose en los profundos dominios de esas materias, en el Conservatorio de San Pietro a Majella de Nápoles. Se doctoró en Historia Moderna en la Universidad parisina y en Historia Contemporánea en IV Sorbonne, ampliando en Lisboa en la Universidadade Nova, manteniendo desde entonces una intensa vida profesional. Marco Aurélio Brescia, organista lusobrasileño, está especializado como ya dijimos en la interpretación fundamentada en criterios historicistas, en especial en instrumentos de tecla, hispanos, italianos y portugueses, dejando constancia en certámenes selectos, mientras mantiene sus labores de permanente investigación. Ejerció como director artístico del “Festival Internacional de Música Histórica de Diamantina”, en Brasil. Veronica Fabbi, estudió arpa clásica en el Conservatorio Ottorino Respighi, en 2002, antes de especializarse en música antigua en Verona y con Mara Galassi en la “ESMUC”. Participó en Festivales como el de Innsbruck, Póvoa de Vazim y ejerce en la Calouste Gulbenkian de Aveiro.

    En apreciación de ambos, para este programa con primacía lusa, se interpretarán piezas como un anónimo portugués- “Sonata para órgano en Do M. (Sonata de Arouca)”, de Frei Francisco de Sâo Boaventura, la “Toccata en Sol M.”- dedicada a la monja tañedora Dona Gertrudes Ritta- y Antonio da Silva Leite (1759/1833) quien acapara un mayor protagonismo, Antonio da Silva Leite, destacando obras para soprano con acompañamiento organístico y arpa, en las que participa la organista Veronica Febbi, según un planteamiento históricamente informado, con procedencia del antiguo Mosteiro de Sâo Bento da Avé-Maria do Porto, que acogió el desarrollo musical de estilo concertante, único en su género, gracias en gran medida a la presencia de la maestra de capilla Anna Ignácia da Freitas, cantante dotada de un virtuosismo canoro de insólitas condiciones. En aquel medio, dejarán memoria compositores a los que la historia comienza a hacer justicia, el nominado António da Silva Leite, e igualmente Frei Francisco de Sâo Boaventura, creadores de obras en atención a la permanente demanda de las monjas de Oporto, y con un importante protagonismo concedido al acompañamiento instrumental, arpa, órgano, a modo de bajo continuo.

    António da Silva Leite, el compositor más apreciado entre los siglos XVIII y XIX, había sido director del Teatro da Ópera de Sâo Joâo, y del que para esta sesión, se elige una lección para el miércoles de ceniza “De epistola prima beati Pauli Apostoli” (Lección 7ª, para cantar no mercores de cinza”, además de “Quoniam vidi inquitantem” (Lección 6ª , in Coena Domini). El motete a solo de órgano “Fulgebunt justi”, para completar este apartado con el “Aria latina”, un canto de alabanza dedicado a Anna Ignácia de Freitas , pieza que se caracteriza por su presencia impresionante merced a su virtuosismo vocal llevado al paroxismo, una idea del alto nivel técnico y musical logrado en el Real Mosteiro da Avé-Maria do Porto, en ese entorno de monjas benedictinas y que supone un fascinante legado que disfrutamos en la actualidad.

    San Paio de Antealtares, gozó de un amplio momento de gran consideración en el ámbito musical, ya que desde comienzos del XVII, contaba con capilla de música de gran nombradía gracias a los miembros que la integraban desde músicos y cantantes, con instrumentos como el propio órgano, al que se añadían arpa y bajones, llegando a disponer en sus años gloriosos de hasta tres órganos. De aquella situación excepcional, por su impagable riqueza, queda como absoluto testimonio el órgano barroco construido en 1784, obra del compostelano Alberto de la Peña y que con el paso de los años, tendrá las imprescindibles restauraciones.

    25 sep 2022 / 17:37
    • Ver comentarios
    Noticia marcada para leer más tarde en Tu Correo Gallego
    Tema marcado como favorito