Los desastres de la guerra

ASÍ lo vemos hoy: desastres que causa la guerra, de una forma más o menos directa. El dolor se cierne, sobre todo, en Ucrania, destruyendo sus bienes y matando a sus gentes... Está sucediendo pero no deja de ser una cierta constante en la Historia de la Humanidad.

En el tiempo de Francisco de Goya él fue testigo de un acontecimiento bélico del que, entre otros testimonios, dejó constancia de lo que acaecía en una serie gráfica a la que, ahora, el profesor López Vázquez le ha dedicado una importante monografía titulada Los Desastres de la Guerra. Exvotos de Goya para el desengaño.

Estamos ante un autor y una serie gráfica de la que existen multitud de aportaciones bibliográficas, lo que supone un sinfín de interpretaciones, tanto sobre el modo de hacer del pintor como el del sentido que ha de dársele a su obra.

En este orden de cosas López Vázquez ha seguido una línea de interpretación que ha mantenido a lo largo de treinta años, concretamente a partir de su libro sobre las pinturas de la Quinta del Sordo.

A su modo de ver, la interpretación que Goya hace en Los desastres de la Guerra es la propia de un pintor filósofo que parte de su concepción estoica de la vida, algo que el autor de esta monografía asienta desde la lectura de un rico repertorio de fuentes.

El resultado de su trabajo, tal como él mismo afirma, es reconocer en cada estampa “un exvoto para el desengaño, a través del cual el pintor no pretende ser un mero cronista de su época, sino un ilustrado que aspira a transformar el mundo para hacerlo mejor”.

Pues bien, como decíamos, estamos, de nuevo, en un contexto bélico, lo que le otorga a lo que estampó este artista el valor de unas reflexiones que vuelven a tener sentido y que aportan planteamientos a tener en cuenta.