Afea Iglesias a la Casa Real que no condene las amenazas a cargos

El candidato de Unidas Podemos a la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias, se preguntó ayer que “cómo es posible” que la Casa Real “todavía” no haya dicho “una sola palabra condenando la violencia fascista” tras las amenazas de muerte “reales y verificadas” por el Ministerio del Interior que han recibido varios cargos políticos, entre ellos él mismo.

En un acto electoral en Getafe, Iglesias hizo alusión a los sobres con balas que recibieron la semana pasada él; el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez.

El exvicepresidente del Gobierno ironizó sobre cuál es el partido “más monárquico de España”, el que “más grita viva el rey y desprecia la democracia y las conquistas de la gente trabajadora en este país”, en una clara alusión a Vox.

Por su parte, Íñigo E. A., el hombre que envió una carta con una navaja ensangrentada a la ministra de Industria, Reyes Maroto, lleva entre 20 y 30 años enviando misivas a diversas personalidades, no todas ellas amenazantes, y es una persona inofensiva, conocida en su domicilio y con problemas de salud mental.

Según explicaron a Efe fuentes jurídicas, este hombre, que puso su nombre y dirección en la carta acolchada que envió a Maroto, tiene 65 años de edad, vive solo en El Escorial y ha remitido, entre otras, una carta a la Embajada de Turquía en Madrid a la atención del presidente de ese país, Recep Tayyip Erdogan.

Las fuentes explicaron que en esa misiva, el autor ha incluido papeles y un libro de segunda mano, subrayado y con dibujos que él hace.

Ayer reconoció que había remitido el sobre a Reyes Maroto, y subrayó que con sus cartas quiere ayudar porque se considera un analista de la información, según indicaron las fuentes después de asegurar que los investigadores ya le conocían de antes y de reiterar que es alguien “totalmente inofensivo”.

Este hombre, que no ha estado detenido en ningún momento, tiene abiertas dos diligencias por parte de la Policía Nacional por la carta a Maroto y de la Guardia Civil por el envío a la embajada turca.

Por otra parte, Ciudadanos y Vox abandonaron ayer el pleno del Ayuntamiento de Madrid antes de la votación de una moción de urgencia presentada por el PSOE para condenar las cartas con amenazas y balas que han recibido varios políticos.

PP, Cs y Vox criticaron duramente que la moción se presentara el mismo día en el que PSOE y Más Madrid no apoyaron dos iniciativas también relacionadas con violencia y partidos, una de Vox sustentada en el mitin del partido en Vallecas el pasado 7 de abril y otra de Ciudadanos sobre “escraches” como el que la vicealcaldesa Begoña Villacís sufrió cuando se encontraba embarazada en las municipales del año 2019.