Berlín y París instan a que la UE no se rezague de China y Estados Unidos

Tanto la canciller alemana, Angela Merkel, como el presidente francés, Emmanuel Macron, se felicitaron este lunes por la capacidad de reacción que está mostrando últimamente la UE, pero advirtieron del riesgo de que el bloque comunitario se quede rezagado respecto de Estados Unidos y de China.

Ambos mandatarios, que comparecieron juntos tras un consejo de ministros bilateral, señalaron los últimos logros del bloque, desde el fondo de recuperación poscovid a las recientes sanciones a Bielorrusia, pasando por el proyecto de defensa FCAS, dentro del que también está integrada España.

El presidente francés, no obstante, abogó por mantenerse alerta para ver si es preciso tomar nuevas decisiones para sacar al bloque de la crisis del coronavirus, pendientes tanto de la evolución interna de la UE como de las dinámicas internacionales. “Los próximos meses nos dirán si necesitamos una mayor ambición en nuestras grandes políticas”, respondió al ser interrogado sobre si sería preciso un nuevo programa de reactivación económica más allá de los 1,8 billones de euros que suman el presupuesto de la UE para el período 2021-2028 y el plan de recuperación poscovid.

En su opinión, es vital seguir “siendo igual de pragmáticos con una voluntad geopolítica” y evitar que la salida de la crisis derivada de la pandemia no desemboque en “cualquier tipo de retraso de la Unión Europea frente a Estados Unidos y China”.

Insistió en que tanto Francia como Alemania harán “lo necesario” para que a nivel tecnológico, como de innovación y de formación de capital humano, la UE “esté en condiciones de decidir por ella misma y de construir su futuro igual que el resto”.

Por eso, la declaración conjunta difundida por París y Berlín insta a que la aplicación de los planes de reconstrucción y resiliencia se lleva a cabo “rápidamente y con éxito” para “acelerar la recuperación económica y social” y “preparar a Bruselas para acometer la transformación digital y ecológica”.

También pide un amplio apoyo a la inversión y a la innovación en “sectores estratégicos”, movilizando “instrumentos financieros de la UE” si es preciso.

Insta al resto de países del bloque a “invertir de forma masiva en tecnologías verdes y digitales”, a proteger sus intereses económicos, y a aprovechar las posibilidades de cooperación de los llamados Proyectos Importantes de Interés Común Europeo para colaborar en política industrial, como el del hidrógeno y la microelectrónica.

Merkel indicó que “cada día se deben tomar decisiones importantes”, apuntó a las próximas cumbres del G7 y la OTAN y destacó la “cultura de diálogo” entre Berlín y París en los últimos años para coordinar esfuerzos.