La recompensa por demorar la jubilación tiene gran recorrido, según Escrivá

Oviedo. El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, subrayó este viernes que la “recompensa” que ofrece el Gobierno central por la jubilación “demorada”, que puede alcanzar hasta los 12.000 euros por cada año que se retrase el abandono de la actividad, es un mecanismo “que tiene mucho recorrido y una clara apuesta por la sostenibilidad del sistema”.

Así lo afirmó en Oviedo durante un desayuno con empresarios organizado por la asociación de directivos APD, donde advirtió de que la edad “legal” de jubilación que se ha fijado en España es “suficiente”, si bien la “efectiva” es “significativamente más baja”.

El ministro puso de manifiesto que la reforma de las pensiones permitirá “dar certidumbre” y “generar un marco de referencia” después de que la aprobada por el PP en 2013 produjese una situación de “vacío” tras “dejar de aplicarla”, lo que generó un “problema de credibilidad” en el marco de la UE.

“Se hizo sin ningún consenso. Ese es el tipo de reformas que no duran, porque no han tenido en cuenta la opinión de casi nadie”, subrayó tras poner en valor que la actual nace del consenso.

Tras sostener que la norma garantizará “de forma permanente el poder adquisitivo”, resaltó que el gasto de España en pensiones “no es muy elevado”, 12 puntos del PIB, mientras que la media europea se fija en 13.

Recordó que la Seguridad Social ha tenido déficits importantes porque se le atribuyeron “gastos impropios”. efe