Ley de violencia intrafamiliar y de género coexistirán con el Ejecutivo castellanoleonés
Mañueco asegura que el decreto de Memoria Histórica seguirá igual a pesar de su acuerdo de gobierno con la extrema derecha
La actual ley autonómica contra la Violencia de Género seguirá vigente y con partidas presupuestarias al menos como hasta ahora en Castilla y León, y convivirá con una futura ley de violencia intrafamiliar, que será el resultado de elevar a rango de ley el actual plan en este ámbito aprobado en 2019 por la Junta, de tal modo que ambas normativas coexistirán.
Tras reunirse de forma telemática con los presidentes provinciales del PP para analizar el acuerdo de gobierno suscrito con Vox, el presidente en funciones de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, hizo este planteamiento en una rueda de prensa en la que defendió que la aprobación de una ley contra la violencia intrafamiliar “en nada modifica” la vigente Ley contra la Violencia de Género, y que no dará “ni un paso atrás” en esta materia tras su pacto sellado con Vox, informa Efe.
Cuando comenzó a referirse a esta cuestión, reconoció que el acuerdo con Vox “ha generado dudas” sobre el tratamiento que tendrá la “violencia intrafamiliar”, cuyo plan “tiene una vigencia que expira en unos meses”, y su vinculación con la actual ley contra la violencia machista.
Una norma que profundizará en cuestiones como la “violencia vicaria”, tal y como figuraba en el anteproyecto de modificación que aprobó su Gobierno en septiembre.
Preguntado por si el modelo educativo “libre de adoctrinamiento ideológico” que plantea su acuerdo con Vox implica la posibilidad de utilizar el denominado pin parental, dijo que se trata de una cuestión demasiado concreta, pero aseguró que en los colegios de Castilla y León actualmente no hay adoctrinamiento alguno, pero que PP y Vox han querido “hacer hincapié en esta materia”.
Finalmente, señaló que el decreto de Memoria Histórica y Democrática de Castilla y León se mantendrá tal y como está actualmente, sin ser derogado o modificado.
Por otro lado, circunscribió el pacto de legislatura con Vox a esta autonomía y lo desligó de este modo del futuro Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo.
Mañueco argumentó que el pacto entre PP y Vox en Castilla y León responde a unas circunstancias concretas y es “aplicable a un momento determinado y a una comunidad determinada”.
De este modo, coincidió con su homólogo de Andalucía, Juan Manuel Moreno, quien el jueves dijo que el pacto en Castilla y León no iba a marcar lo que pudiera suceder en Andalucía, la próxima comunidad en celebrar una cita electoral.
No obstante, Mañueco sí que mostró su “sorpresa” ante la opinión negativa que, según algunas fuentes, habría mostrado el aún presidente del PP nacional, Pablo Casado, al grupo de los populares en el Parlamento Europeo sobre el pacto con Vox.
Preguntado sobre este hecho, Mañueco simplemente reconoció estar “sorprendido” y dijo que días atrás, en el Comité Ejecutivo que celebró el PP, el propio Pablo Casado le trasladó su respaldo y el de la formación “para negociar y continuar así con un gobierno de éxito”.
Sobre la “triste sorpresa” en el seno del PP europeo, se ofreció personalmente a mantener un encuentro con los populares europeos para explicarles los puntos de este acuerdo que, en opinión de Mañueco, “encaja perfectamente dentro de los principios del PP en Europa”.
···La coordinadora general del PP, Cuca Gamarra, defendió frente a las críticas del PP europeo que el Gobierno con Vox en Castilla y León está enmarcado en el “orden constitucional” y tiene como base programática “el respeto a todos los principios y políticas que defiende y lidera el PP”. Insistió en defender este pacto con Vox, señalando que “lo importante es que se ha conformado un gobierno que va a tener estabilidad, que lidera el PP, que se enmarca dentro del orden constitucional y cuya base programática es el respeto a todos los principios y políticas que defiende y lidera el Partido Popular”.
···El jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, cree que el acuerdo provoca un momento “crítico” en la democracia y pide al próximo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que no plantee “excusas de mal pagador” para justificar el pacto. Tras señalar que algunos líderes europeos le habían comentado ese acuerdo aunque no quiso precisar cuáles, insistió en considerar “muy grave” esa decisión, como cree que demuestra el que medios internacionales titulen que por vez primera en la etapa post-franquista la ultraderecha va a entrar en un gobierno autonómico.
Madrid. Sectores del PP mostraron su “enfado” e “indignación” contra el todavía líder del partido, Pablo Casado, por presumir ante los socios del Partido Popular Europeo de que en su mandato no se pactó con la extrema derecha, el mismo día en el que Alfonso Fernández Mañueco anunciaba un acuerdo con la formación de Abascal.
Además, le recordaron su propia hemeroteca, citando por ejemplo el hecho de que el último día de campaña de las generales de abril de 2019 deslizara en público la posibilidad de que Vox tuviera ministerios en su Ejecutivo.
En la cumbre del PPE que se celebró este jueves en París, la última para él antes de que Alberto Núñez Feijóo tome el mando del PP, Casado expresó ante sus colegas europeos su rechazo a pactar con la extrema derecha, sin bien no hizo ninguna alusión específica al acuerdo que el PP y Vox habían anunciado ese mismo día en Castilla y León, informaron a Europa Press fuentes presentes en esa reunión a puerta cerrada.
Sus declaraciones causaron un “profundo malestar”, “enfado” e “indignación” en algunos sectores del partido, reconocieron distintas fuentes consultadas por Europa Press, que en incluso hablaron de “deslealtad”.
“Me parece de una gravedad intolerable por parte de Casado”, sintetizó un dirigente popular, que considera que esas manifestaciones evidencian que lo único que está buscando es “salvar su cabeza o su reputación”. e.p.