Mensaje de urgencia de España sobre el presupuesto de la UE

La ministra española de Exteriores, Arancha González Laya, dijo ayer que España iba a mandar un “mensaje de urgencia” en la cumbre que los líderes europeos celebraron ayer por videconferencia sobre la necesidad de aprobar el presupuesto de la UE para 2021-2027, que bloquean Hungría y Polonia.

“Enviaremos un mensaje (...) de urgencia para la Unión Europea en su conjunto y apoyaremos el esfuerzo de la Presidencia europea para buscar ese consenso lo antes posible”, dijo González Laya.

Originalmente estaba previsto que la telecumbre sirviera para hablar de cómo afrontar la segunda ola de la covid-19, pero tras el veto de Hungría y Polonia al presupuesto plurianual, los líderes trataban también la cuestión, fundamental de cara a la recuperación económica tras la pandemia, informa Efe.

“El Fondo de Recuperación europeo es una necesidad imperiosa para la UE, no para algunos miembros de la UE, lo es para todos, lo es también para Polonia y Hungría”, dijo la ministra, asegurando que “eso mismo es lo que les están diciendo los empresarios en sus países respectivos”.

“Lo urgente en esos momentos es desencallar esta negociación”, aseguró.

Budapest y Varsovia vetaron el presupuesto plurianual, aparejado al Fondo de Recuperación, por la condicionalidad de los fondos al cumplimiento del Estado de Derecho.

El ministro de Gobernación de Hungría, Gergely Gulyás, insistió ayer en que no hay ninguna posibilidad de aprobar el presupuesto plurianual y el paquete de recuperación si no se elimina la condicionalidad del respeto al Estado de derecho.

“La probabilidad de que el presupuesto y el paquete de recuperación sean aprobados en su forma actual es cero”, aseguró Gulyás en una rueda de prensa telemática.

Fuentes de delegaciones diplomáticas en Bruselas explicaron en la víspera de la reunión que no se esperaba que en esta se desbloquee la situación, pero sí que Hungría y Polonia detallen qué es lo que no aceptan del mecanismo sobre el Estado de derecho, más allá de “vaguedades”, y que propongan soluciones.

Ni Varsovia ni Budapest, dos de los grandes beneficiarios del paquete financiero, tienen nada en contra del acuerdo político alcanzado en julio sobre la parte económica, que prevé un desembolso total de 1,8 billones de euros entre fondo y presupuesto en los próximos siete años.

Pero el retraso en poner en marcha las ayudas financieras europeas puede afectar “severamente” a la recuperación económica de los Veintisiete, según declaró ayer la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, quien pidió poner en marcha “sin demora” el fondo de 750.000 millones de euros.