Puigdemont abandona la cárcel y queda libre sin restricción de movilidad

El Tribunal de Apelación de Sassari (Italia) dejó en libertad al expresidente catalán Carles Puigdemont, sin medidas cauterales, antes de decidir sobre la entrega de este político independentista a las autoridades españolas, fijando una vista para el próximo 4 de octubre. Así, le dejaron este viernes, pudiendo viajar fuera de Italia.

El político catalán fue detenido este pasado jueves en L’Alguer en virtud de una euroorden del Tribunal Supremo, pero no declararó este viernes, aunque inicialmente estaba previsto que lo hiciera al mediodía, después de que su equipo jurídico haya solicitado más tiempo para estudiar el caso, según informó su abogado en Italia, Agostinangelo Marras.

Ante esto, el Tribunal de Apelación de Sassari fija para el próximo día 4 de octubre la vista para decidir sobre la entrega o no a España del expresidente catalán Carles Puigdemont, que no tiene restricciones de movilidad a pesar de que en un principio se informó de que no podía salir de la isla italiana.

Así lo reveló el abogado de Puigdemont en Italia, que acudió a la prisión de alta seguridad de Sassari en la que se encontraba encarcelado tras el arresto en el aeropuesto italiano L´Álger.

El juez considera que su detención se llevó a cabo de acuerdo con la ley establecida, pero decidió dejarle en libertad sin ninguna otra medida cautelar, pudiendo desplazarse por Europa sin impedimentos legales.

Puigdemont, que intervino en la vista de este viernes telemáticamente y sobre el que pesa una la orden europea de detención y entrega cursada por el Tribunal Supremo por un delito de sedición y malversación, ya abandonó el lugar a media tarde de este viernes, acompañado por la presidenta del Parlament, Laura Borràs, y la consellera de Acción Exterior, Victòria Alsina, quienes esperaron en la salida de la prisión, así como también la portavoz de ERC, Marta Vilalta, y la eurodiputada republicana Diana Riba. A su salida aseguró que se encuentra “muy bien” y ha ironizado sobre el hecho de que haya salido libre: “España no pierde nunca las oportunidades de hacer el ridículo”.

Así lo lo dijo rodeado de periodistas mientras caminaba a su salida de la prisión. Según Puigdemont, la “decisión” del Tribunal General de la Unión Europea sobre su libertad de movimientos por territorio europeo, en su condición de eurodiputado, era “clarísima”.

El político explicó que antes de aterrizar en el aeropuerto de Cerdeña, ayer jueves, “tenía una noticia de que había carabinieri” y pensó que “esto podía pasar”, en alusión a su detención. Pero “sabemos también cómo puede acabar”, dijo confiado en que su caso se resolverá sin una extradición a España

El expresidente de la Generalitat detenido y recientemente liberado, aseguró que la eurooden que pesaba sobre él, había quedado “suspendida” cuando el pasado 30 de julio le levantó la inmunidad como eurodiputado.

El Tribunal General indicó en su auto que las euroórdenes de detención, que el Supremo dictó tras la sentencia del procés, habían quedado suspendidas hasta que no se resolviera la cuestión prejudicial del magistrado del Supremo, Pablo Llarena sobre las razones que permiten rechazar una extradición.

Esta mañana, Llarena, que instruye la causa contra Puigdemont, remitió a la autoridades judiciales italianas la euroorden cursada el 14 de octubre de 2019 contra él por sedición y malversación así como la cuestión prejudicial planteada al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).

Lo hizo a través de un oficio enviado al representante de España en Eurojust para que remita sendos documentos al Tribunal de Apelación de Sassari (Italia).

En su escrito dirigido a las autoridades judiciales italianas, el magistrado deja claro: que la Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) está “actualmente en vigor” y que “el procedimiento judicial del que deriva la euroorden está activo y pendiente de la captura de los procesados en situación de rebeldía”.

Pero también que la tramitación de la cuestión prejudicial en el Tribunal de Justicia de la UE “no modifica la situación en que se encuentra actualmente el procedimiento, sin perjuicio de que deba acomodarse en su día a la interpretación que del derecho europeo, y sobre las estrictas cuestiones suscitadas, realice el TJUE”.

Actualmente, el expresidente de la Generalitad tiene vía libre hasta la celebración de la vista el 4 de octubre.