Sánchez anuncia un mayor gasto militar para salvaguardar la seguridad democrática

Este lunes tuvo lugar en Madrid una suerte de reunión preparatoria para la próxima cumbre de la OTAN que acogerá España los días 29 y 30 de junio. Así, coincidiendo con el homenaje al 40 aniversario de la entrada de nuestro país en la Alianza, su secretario general, Jens Stoltenberg, aterrizó en Madrid.

Durante el acto, presidido por el rey Felipe VI y con la asistencia de más de 300 invitados, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció que es “imprescindible” abordar una mayor inversión en gasto militar con el fin de garantizar la estabilidad y la seguridad de España y que conflictos como el de Ucrania no pongan en riesgo el actual modelo democrático.

“Voy a transmitir a los españoles que debemos hacer ese esfuerzo, porque mucho mayor es el coste de quedarse de brazos cruzados mientras se pone en jaque lo más elemental, lo más fundamental de nuestra sociedad, como es la libertad y nuestro modelo de convivencia pacífica y democrática”, señaló Sánchez.

Para ello, anunció el compromiso de elevar el gasto militar en presencia del secretario de la OTAN, y de los representantes de los 30 países que integran la organización, además de los expresidentes del Gobierno Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero.

La decisión de Rusia de invadir Ucrania, según Sánchez, “ha abierto los ojos” a la sociedad europea y española de que “la unidad es esencial” para preservar la seguridad y de que esta “no está garantizada de forma inmediata” y puede “corromperse” si no se actúa, manifestó.

“La democracia que nuestras sociedades disfrutan y nuestra prosperidad necesitan imperiosamente de la seguridad. Cuando la seguridad está en peligro, todos sus fundamentos corren el riesgo de colapsar”, advirtió, haciendo hincapié en que para hacer frente a amenazas como la de Rusia “es imprescindible reforzar las capacidades de disuasión”, lo que “va a exigir capacidades militares modernas, capaces y disponibles que solo se adquieren con un aumento de la inversión en defensa”.

“Somos muy conscientes de ello (...). No hay otro camino. Si queremos ofrecer un legado de libertad y democracia a las futuras generaciones, hay que tomar decisiones que refuercen nuestra alianza y la doten de las herramientas y capacidades adecuadas para abordar los desafíos que tenemos por delante”, remarcó.

Pese a todo, no dio detalles de cómo se va a afrontar la mayor inversión militar, ni cuál va a ser el volumen de gasto que planea recoger en los presupuestos para el próximo año. La partida para el presente ejercicio representa el 1,03 % del PIB y la meta marcada por el Ejecutivo es duplicarla en 2024.

PREOCUPACIÓN ANTE LAS AMENAZAS YIHADISTAS. Durante el acto, más allá de la inversión económica en Defensa también se habló de las estrategias militares de la organización. Lo hizo el rey de España, Felipe VI, que reclamó a la OTAN que, además de vigilar su flanco oriental y la amenaza de Rusia, preste “cada vez más atención” a su frontera sur, donde hay un auge del terrorismo yihadista que “amenaza directamente nuestras sociedades” y la atención sobre otros actores “estatales y no estatales” que lo intentan hacer también “de forma indirecta”.

Así, en medio de su discurso de clausura del 40 aniversario español, recordó que este homenaje “lamentablemente” no se celebra en las circunstancias deseadas, debido a la “inaceptable” agresión de Rusia contra Ucrania, que recuerda “de manera trágica” el “enorme valor” que tienen la paz, la seguridad y la democracia para cualquier país.

Además, avisó de que esta invasión no solo pone “en riesgo” la soberanía e integridad territorial de Ucrania, sino también cientos de miles de vidas, la paz en todo el continente europeo y, por extensión, el orden internacional.

Con ello, Felipe VI garantizó que España comparte “plenamente” la importancia “crucial” de mantener “una sólida disuasión y defensa” del flanco oriental de la OTAN y recordó que así lo hace “sobre el terreno” con los despliegues militares que las Fuerzas Armadas mantienen en los países bálticos. Sin embargo, avisó de que la seguridad colectiva también requiere que la Alianza presta “cada vez más atención” a los “desafíos de la dirección sur”.

Finalmente, el rey aseguró que España asume la cita de la cumbre de los días 29 y 30 de junio “con la mayor responsabilidad” y consciente de su “dimensión histórica”, por lo que “no escatimará en esfuerzos” para garantizar su éxito, con el objetivo de que el encuentro pueda ofrecer a la OTAN las herramientas necesarias para hacer frente “a todos los retos comunes”.