Una barricada generalizada en Rangún domina un nuevo día de fuertes protestas en Birmania

Madrid. Cientos de miles de manifestantes levantaron ayer barricadas en todas las carreteras hacia las ciudades más importantes de Birmania, comenzando por su centro económico, Rangún, en un nuevo día de protestas contra las autoridades militares del país tras el golpe de Estado de febrero. La Policía se desplegó en los puntos más concurridos de las barricadas, levantadas con sacos de arena, donde lanzaron gases lacrimógenos y balas de goma contra los concentrados, según los testigos. “Para estar a salvo mientras protestamos, hemos levantado unas barricadas grandes y pesadas en esta carretera, en defensa propia”, explicó uno de los manifestantes, Ko Ko Win, desde una vía de circulación en el sur de Okkalapa, Rangún

Otro de los manifestates, Myat Khine, dijo que una de las barricadas, en Okkalapa del Norte, tapó seis carriles de una autopista, obstruidos por sacos de arena y ladrillos. “Antes de que las fuerzas de seguridad nos ataquen, debemos correr a un lugar seguro”, explicó firme el residente de una población donde hasta 18 jóvenes murieron por los disparos de las fuerzas de seguridad a principios de esta misma semana. efe