El Dr. Antela sostiene que habrá más contagios pero menos graves

“Actualmente, la situación en el Hospital de Santiago es de estabilidad, en fase de meseta desde hace unas dos, tres semanas o quizá cuatro”, asegura el Jefe del Servicio de Infecciosos del CHUS, Antonio Antela, que explica que, en estos momentos, “rondamos los 15-18 pacientes en planta, dependiendo del día” y, “en las unidades de cuidados intensivos, hay un número proporcional”.

El doctor ejemplifica que cuando se alcanzó el máximo de la tercera ola, el hospital llegó a albergar a 180 enfermos de COVID. Antes de la Semana Santa, se alcanzó el mínimo, cifrado en once pacientes y, después de esas festividades, la cifra saltó a 24-25. “Desde esas fechas nos hemos mantenido alrededor de 20 enfermos diarios, unos días con 18 ingresados y otros con 21, otros con 17... Dependiendo del número de ingresos y de altas”, apunta Antela.

Todo ello le lleva a determinar que, efectivamente, “estamos en una fase de meseta, aunque un poquito por encima del mínimo alcanzado en la tercera ola”. El experto diría que nos encontramos ante “una cuarta ola muy mitigada”.

De hecho, si bien este martes subieron a cinco los pacientes en uci (uno más), bajaron a 19 los de otras unidades (tres menos). Por su parte, los casos activos llegaron a 347 (seis más).

NO CONVIENE DESESCALAR MUY PRONTO. Además, se posiciona sobre cómo evitar que la curva crezca: “Yo creo que si mantenemos el nivel de restricciones que tenemos en este momento y la vacunación avanza rápidamente, como parece que lo está haciendo, seguramente podamos mantener esta situación, con poco impacto”. Así, Antela apunta que “aunque va a seguir habiendo nuevos diagnósticos, estos tendrán poco impacto en la hospitalización, como está sucediendo en estos momentos de la pandemia”. Por ello, considera que sería un error liberar las restricciones y “hacer una desescalada excesivamente rápida”. “Creo que deberíamos mantener este nivel de restricciones por lo menos hasta el verano, para que el número de personas vacunadas se incremente de forma significativa entre la población y en verano podamos abrir un poco más la mano”, sentencia.

SITUACIÓN GENERAL DE GALICIA. De momento, la comunidad gallega sigue inmersa en la estabilidad, con ligeros repuntes. Los casos activos ascendieron ayer hasta los 3.022, lo que supone solo siete más que este lunes (3.015), un crecimiento del 0.23%. Esto nos sigue situando en cifras de finales del mes de agosto. El área sanitaria de Vigo sigue siendo la que alberga la mayor parte de los casos: 894 (16 más); seguida de la de A Coruña, con 741 (ocho más); y Pontevedra, con 458 (27 menos). Por lo que respecta al número de nuevos contagios este fue de 127 (32 menos que el día anterior).

En los hospitales la situación empeoró mínimamente. Así, en estos momentos permanecen en planta de los hospitales gallegos un total de 174 pacientes COVID, cuando el lunes eran 169, el equivalente a cinco más (un 2,87%). Por otro lado, las ucis solo suben un paciente, hasta los 46 enfermos críticos, frente a los 45 del lunes (uno más).