El riesgo de contagio de menores a adultos convivientes es bajo
Así lo refleja un estudio realizado por el hospital catalán Vall d’Hebrón sobre 139 familias
Se aproximan las Navidades y, con ellas, el deseo de las familias de celebrar juntas. Esta festividad será este año especialmente dura para los más pequeños, que verán coartada su relación con tíos, primos y todos aquellos familiares que les ayudan a conformar su identidad como personas.
Para tratar de que estas fiestas no sean tan tediosas para ellos, el pasado jueves el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, lanzó su propuesta de que los menores de 10 años no cuenten en el límite establecido por el Gobierno para las cenas familiares (6 personas).
Pero, ¿es esto recomendable? ¿Qué consecuencias podría tener? ¿Son los niños un importante vector de contagio para los adultos? Pues lo cierto es que no. Un estudio publicado el 31 de agosto por el centro hospitalario de Barcelona Vall d’Hebron analizando los casos de 163 pequeños contagiados de COVID durante el confinamiento en Cataluña (el único estudio hasta la fecha de estas características), concluyó que la transmisión del SARS-CoV-2 de los menores de edad a los adultos con los que conviven es muy baja.
En concreto, de todos los pacientes pediátricos analizados entre el 1 de marzo y el 31 de mayo, solo un 3,4 % actuaron como transmisores del virus hacia el resto de miembros de su grupo familiar.
Asimismo, el estudio, titulado ‘Papel de los niños y las niñas en la transmisión intrafamiliar del SARS-CoV-2’, constató que solo en 3 (3,4%) de 89 casos el menor fue claramente identificado como desencadenante del brote de contagios en la familia.
En otros 36 casos (el 40,4%), no se pudo identificar el patrón de transmisión del virus; y, en los 50 restantes (56,2%), los responsables de que se contagiasen varios miembros de la unidad familiar fueron personas adultas, no los menores.
FACTOR DE CONTAGIO INFERIOR A LOS ADULTOS. En consonancia con estos datos, Feijóo también insistió el jueves en que los niños de diez años “tienen un factor de contagio inferior a los adultos”. Por eso, consideró que no es razonable “que una familia que tiene cuatro hijos, no pueda ir a comer o a cenar con nadie en las fiestas navideñas, por alcanzar ya el límite que plantea el Gobierno de seis personas”.
MENOR SINTOMATOLOGÍA EN NIÑOS. Además, el estudio del hospital Vall d’Hebron, en colaboración con la Secretaría de Salut Pública de Catalunya y la Societat Catalana de Pediatría, demostró que los síntomas de coronavirus en los menores son de leves a inexistentes.
Así, solo 31 de los 163 pacientes pediátricos analizados necesitaron de hospitalización (un 19 %). Un total de 132 (el 81 %), presentó cuadros clínicos inespecíficos y poco graves, que no precisaron de ingreso. Y en las 89 familias en las que se pudo completar el estudio, 19 menores (un 21,4 %) fueron totalmente asintomáticos.
Si nos centramos en tipificar los síntomas, el informe refleja que los más frecuentes en niños contagiados por el COVID fueron la fiebre (59,6%) y la tos (49,4 %), seguidos de la fatiga (40,5 %) y la dificultad respiratoria (31,5 %). Se desmiente, por tanto, que los niños se sometan a mayor riesgo en estas reuniones.
··· Un pocentaje muy significativo de menores de edad infectados por el SARS-CoV-2 se sitúa en una franja de edad a partir de los 12 años. En concreto, sobre los 139 casos del estudio del hospital Vall d’Hebron, 42 se dieron entre los niños de 12 a 16 años; otros 42 entre los de 16 a 18; unos 30 tenían entre 6 y 12; 19 entre 3 y 6; y 30 entre 0 y 3.
··· Esto refuerza la propuesta del presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, de no contabilizar en las reuniones familiares navideñas a los menores de 10 años, pues estos tienen todavía menor infectividad que los menores de más de 12 años, cuya posibilidad de contagio sigue siendo baja.