Juan Carlos I pasó por Sanxenxo antes de viajar hacia Santo Domingo vía Oporto
Se instalará en un resort de lujo en La Romana, propiedad de la familia Fanjul y grandes amigos del exmonarca// El rey emérito asumirá la existencia de un delito fiscal por sus actividades opacas
A falta de una confirmación oficial que no se va a dar, Juan Carlos I ya se encuentra en la República Dominicana instalado en un resort de lujo, Casa de Campo, propiedad del multimillonario José Fanjul, uno de los grandes amigos del exmonarca español con el que también le unen lazos de parentesco, ya que una Borbón estuvo casada con un antepasado del conocido como el rey del azúcar en la isla caribeña. Medios con buenos contactos en círculos monárquicos, como ABC y La Vanguardia, ya se hacían eco ayer de esa posibilidad que fue asumida por personas del entorno del rey emérito.
Pero la huida al exilio o marcha voluntaria, según quien interprete lo ocurrido, tuvo un pasaje muy gallego: la última noche de Juan Carlos de Borbón en España la pasó en Sanxenxo y, aunque existe un mutismo generalizado, todo apunta a que fue en el chalé de Pedro Campos, el multipremiado regatista y compañero muy cercano del exmonarca.
Don Juan Carlos habría abandonado La Zarzuela para dirigirse a la localidad costera de nuestra comunidad donde se reunió con un grupo de amigos, de los pocos que mantenía en los últimos tiempos. Solo dos de ellos, según fuentes a las que tuvo acceso EL CORREO GALLEGO, estaban al tanto de lo que iba a ocurrir pero nadie dijo nada durante las horas en las que pasaron juntos.
Posteriormente en coche se desplazaron a Oporto desde donde el rey emérito tomó un vuelo que le llevó hasta Santo Domingo aunque no trascendió si se trataba de un vuelo privado (lo más posible) o uno comercial donde le sería más difícil pasar desapercibido. Desde el aeropuerto de la isla caribeña se trasladó en helicóptero, junto a sus anfitriones, hasta el impresionante resort en La Romana donde pasará unas semanas de descanso, a la espera de que se aclare la vertiente judicial, en Suiza y España, en la que se encuentra inmerso.
Diversas fuentes oficiales señalaban ayer que el acuerdo entre Felipe VI y su padre, con el beneplácito de una parte del Gobierno (el vicepresidente segundo y los ministros de Unidas Podemos no sabían nada), contempla que asuma la existencia de un delito fiscal y salde la posible deuda y multa que se le imponga desde la Hacienda Pública.
NI CASA REAL NI GOBIERNO. El paradero actual del Rey Juan Carlos I fue de las preguntas más formuladas por los periodistas durante la rueda de prensa de Pedro Sánchez, una cuestión que el presidente ha rehuido en sus respuestas incidiendo en que no tiene la información sobre dónde está el monarca.
Sánchez se remitió a la confidencialidad de los despachos con el actual jefe del Estado y recalcó que respeta la decisión que ha tomado la Casa Real “marcando distancias” respecto a unas presuntas conductas irregulares.
En la rueda de prensa, a Sánchez también le han preguntado por quién paga la estancia del rey emérito en el país en el que reside. Ante esta cuestión, el jefe del Ejecutivo se ha remitido a la asignación a la Casa Real de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). En relación con la seguridad de Juan Carlos I en su nueva estancia, Sánchez ha vuelto a evitar esta pregunta y se ha referido al respeto por la decisión que ha tomado en Zarzuela, desde don no se realizó ni un solo comentario sobre el tema.
COMPLEJO EXCLUSIVO. Casa de Campo, una lujosa urbanización a orillas del mar Caribe en el este de la República Dominicana, es la posible nueva residencia del rey emérito Juan Carlos I, aunque ninguna fuente oficial en República Dominicana o en España quisieron confirmar la presencia del padre del rey Felipe VI en el país caribeño, según informa Efe desde Santo domingo.
El exmonarca es buen conocedor de este complejo, ya que ha sido invitado en diversas ocasiones por su amigo Pepe Fanjul, un rico empresario azucarero cubano que es dueño de la urbanización, colindante con la ciudad de La Romana.
En 2015 asistió al acto en el que se bautizó con su nombre la calle principal del complejo, avenida que conduce hacia el aeropuerto de La Romana. Este martes a las puertas del complejo había el movimiento normal de vehículos y de agentes de seguridad, además de unos pocos periodistas, sin ningún indicio de la presencia del rey emérito.
Casa de Campo es uno de los complejos residenciales más exclusivos no solo de la República Dominicana, sino del Caribe. Las espectaculares mansiones que alberga dentro de las extensas instalaciones tienen la intimidad garantizada, puesto que los terrenos está alejados de todo y son inaccesibles para el no residente. Además de los servicios básicos, este residencial de lujo cuenta con su propia marina y un campo de golf a orillas del mar.
Dentro del recinto también se encuentra el enclave de Altos de Chavón, la reproducción de una villa mediterránea, ubicada en unas colinas que dominan los meandros del río Chavón. En esa zona hay un bonito anfiteatro, que sí se puede visitar previo pago de una entrada.
Además de lugar de residencia de millonarios conocidos y anónimos, este enclave ha acogido conciertos de estrellas internacionales.
le espera
en estoril
···El rey emérito Juan Carlos I no está en Portugal, confirmaron a Efe fuentes oficiales, por lo que se descarta la posibilidad de que ahora se haya trasladado a vivir a Estoril, como difundieron algunos medios portugueses. En esta localidad portuguesa pasó su infancia, ya que sus padres vivieron allí parte del exilio.
A unos 25 de minutos de Lisboa, con un paisaje de playa, sol y tranquilidad, Estoril fue el hogar de la exiliada familia real española desde 1946, y allí vivió Juan Carlos I varios años de tardía adolescencia y primera juventud. Algunos de los recuerdos más difíciles del monarca emérito reposan aquí, como la muerte de su hermano Alfonso -tras un accidente con un revólver-, y también de los más felices antes de regresar a España y comenzar su vida institucional.
Los reyes Felipe VI y Letizia mantienen su agenda tras hacerse pública la decisión de don Juan Carlos de abandonar España y se trasladarán el fin de semana a Palma para iniciar una estancia de diez días durante la que recorrerán las Baleares y conocerán con detalle los efectos de la pandemia de coronavirus en la comunidad.
Este lunes, cuando Zarzuela comunicó que el rey Juan Carlos abandonaba España, no hubo actividad pública oficial de ningún miembro de la Familia Real, y tampoco está previsto a priori que la haya hasta ese desplazamiento a Palma. Sí se dio a conocer que el pasado viernes, después de que Felipe VI asistiera en San Millán de la Cogolla (La Rioja) a la apertura de la Conferencia de Presidentes, visitó el Cuartel General de la Unidad Militar de Emergencias.
Si la Casa Real no incluye ningún acto más de última hora en su agenda, la próxima vez que se verá públicamente a don Felipe y doña Letizia, acompañados por sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, será en Palma. Sería, por tanto, la primera vez que se les vea después del último escándalo.
A Palma llegarán entre el viernes 7 y el sábado 8 de agosto, y allí coincidirán con la reina Sofía, que se encuentra ya desde hace varios días en el Palacio de Marivent junto a su hija la infanta Elena. La salida de don Juan Carlos no afecta para nada a doña Sofía, que seguirá residiendo en Zarzuela y mantendrá sus actividades institucionales.
Si se mantiene la tradición de años anteriores, habrá alguna imagen pública en Baleares de doña Sofía con la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía. La tradicional estancia veraniega de los reyes en la comunidad se extenderá hasta el 17 de agosto y este año estará condicionada por la situación del covid-19.
Prevén protagonizar una intensa agenda en la que se desplazarán a las diversas islas con el fin de mantener un contacto directo con los sectores sociales y económicos más afectados por las consecuencias de la pandemia. Debido a ella, no tendrá lugar la tradicional recepción a la sociedad balear en el Palacio de La Almudaina de Palma, sino que serán los reyes quienes se desplazarán a las islas.
El rey sí mantendrá las audiencias a las autoridades autonómicas y de Mallorca, así como el habitual despacho con el presidente del Gobierno en Marivent. Finalizada su estancia en Palma, Zarzuela ha avanzado que los reyes y sus hijas tienen previsto regresar a Madrid, con lo que no prevén disfrutar de unos días de vacaciones privadas.