Convencer con sentido común y anteponer los intereses generales

En una sociedad tan localista como la gallega no es fácil alcanzar consensos entre las distintas ciudades. Hay alcaldes, como el de Vigo, que se empeñan en tratar de arrimar el ascua siempre a su sardina. Y eso muchas veces es imposible. Lo mismo ocurre con las universidades. Cíclicamente la de A Coruña reclama un desconocido derecho a crear su propia Facultad de Medicina. Desde la Consellería de Educación hay que torear con mucho tino y en eso Román Rodríguez es un auténtico maestro. No es fácil convencer a los tres rectores y el conselleiro volvió a hacerlo con una iniciativa pionera que les permitirá compartir aquellos másteres que más demanda la sociedad. Un nuevo ejemplo. j.A.p.