Muros-Noia prepara la candidatura de su marisqueo a Patrimonio Inmaterial

Miles de mujeres y hombres de la ría de Muros-Noia están pendientes cada día de la tabla de mareas para salir a mariscar en las playas de la zona. Generación tras generación, han ido enriqueciendo su oficio con técnicas artesanales, con un profundo conocimiento del medio y con organización profesional. Y, en su forma de relación con el entorno, generaron una cultura ancestral propia. Un oficio que constituye un tesoro patrimonial.

Ahora, los concellos de Noia, Muros, Outes y O Son y las cofradías de Noia, Muros, O Son y Portosín se han aliado en torno a un ambicioso objetivo común: conseguir que el marisqueo en dicha ría sea reconocido por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial.

La Consellería do Mar aprobó la cofinanciación del correspondiente proyecto (en cuya gestación tuvo un papel protagonista el GALP Costa Sostible) a través del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca que gestiona dicho departamento autonómico.

La iniciativa se apuntala en cuatro valores esenciales: el carácter milenario y su continuidad en el tiempo; la impronta generada en las formas de organización social; el papel específico de las mujeres; y una relación sostenible con el medio.

En este sentido, el marisqueo está atestiguado en asentamientos prehistóricos de nuestro litoral; incluso escribe un capítulo propio de la evolución de la economía extractiva a la de cultivo y la aparición de una industria. Y hoy sigue siendo un motor indiscutible de nuestra forma de vida. El marisqueo, junto con la pesca artesanal, han generado estructuras de organización social que superan, con mucho, la meramente profesional.

“Destaca, sobre todo, el papel de las cofradías y de las agrupaciones profesionales que se integran en ellas. Además, son una fórmula histórica de autogestión local, con gran componente comunitario y democrático y que, también en la actualidad, prima un reparto socialmente justo de la riqueza generada. La actividad marisquera ha creado una división de género en el trabajo, otorgando un papel específico a las mujeres... también en la toma de decisiones”, indican los promotores.

Esto debe ser tenido en cuenta tanto como hecho cultural como realidad sobre la que incidir; debe ser también objeto de reflexión para evitar que se perpetúen formas de discriminación o de encasillamiento.

junio de 2021. El marisqueo es una actividad muy sensible a las formas de explotación y a todo lo que ocurre en el medio. Por ello, siempre ha estado muy vigilada por sus protagonistas. Hoy, en la ría de Muros Noia esto ha dado lugar a modernos sistemas que aseguran la gestión sostenible de los recursos. “Los profesionales del marisqueo son los que mejor conocen el estado del ecosistema litoral y los primeros interesados en evitar agresiones al mismo”, indican al respecto.

El proyecto se aprobó el 8 de septiembre del año pasado y tiene un plazo de desarrollo de 27 meses, por lo que se estructura en base a tres anualidades (2019, 2020 y 2021), estando previsto que finalice el 30 de junio del próximo año. El coste total es de 85.500 euros, de los que la ayuda pública cubre el 91 % (72.593 euros). De estos, 61.704 proceden del FEMP y 10.888 de la Comunidad autónoma. El resto se financia con la inversión privada.

El alcalde de Outes, Manuel González, señala que “nestes momentos estase preparando a candidatura co apoio dunha axuda do GALP, ca que se financian os informes necesarios (patrimoniais, científicos, etc.) e o material de difusión (vídeos promocionais, difusión nas redes sociais, etc.)”.

estudios y seminarios. Los principales objetivos son la integración de la cultura del marisqueo de la ría de Muros-Noia en el catálogo o inventario del Patrimonio Cultural de Galicia; la candidatura conjunta ante la Unesco, junto con otros territorios o entidades de otros países para su declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial; la investigación cultural del marisqueo en la zona; y aumentar la difusión.

En cuanto a los resultados concretos que se prevén con la implementación del proyecto, figuran, por ejemplo, cuando menos dos trabajos técnicos (uno ligado directamente a los requisitos de la candidatura y otro más completo que permita profundizar en el conocimiento de la temática; la realización de un vídeo y de un catálogo fotográfico atendiendo a los requisitos de la Unesco y de la Consellería de Cultura para la documentación de los expedientes; un seminario técnico sobre la cultura del marisqueo en la ría; la creación de un partenariado internacional para la candidatura conjunta; o la realización de un programa de actividades de difusión de la cultura del marisqueo en el territorio para favorecer su conocimiento y puesta en valor.

La distribución de las actividades es la siguiente: la cofradía de Noia, con un presupuesto de 15.000 euros, hará el informe científico, el vídeo documental y el estudio multidisciplinar; la de Muros, con 6.000 euros, la edición de monografía; la de Portosín, con 6.000 euros, la memoria fotográfica y el programa cultural (parcial); la de Porto do Son, con 6.000 euros, las asistencias técnicas adicionales; el Concello de Noia, con 15.000 euros, el viaje de estudio y coordinación, el programa cultural (parcial) y la organización de partenariado internacional (parcial); el de Muros, con 12.500 euros, la difusión en los medios de comunicación; el de Outes, con 12.500 euros, el seminario técnico, la página web y la difusión en las redes sociales; y el de Porto do Son, con 12.500 euros, la organización de partenariado internacional (parcial).

SÓLO 19 elementos. Lo que se pretende aportar al mundo con esta iniciativa es el testimonio de un modelo de integración de civilización y naturaleza en el ámbito litoral que creó una cultura propia, genuina, duradera y cambiante a lo largo de la historia y que actualmente es modelo ambiental y socialmente sostenible de gestión de los recursos marinos.

Por lo que respecta a las Listas del Patrimonio Cultural Inmaterial y el Registro de Buenas Prácticas de Salvaguardia, en la actualidad hay registrados un total de 549 elementos correspondientes a 127 países.

Cada año, un comité se reúne para evaluar las candidaturas presentadas y tomar una decisión sobre la inscripción de las prácticas y expresiones culturales del patrimonio inmaterial que fueron propuestas. Las candidaturas de 2020 serán discutidas por el comité durante su decimoquinta reunión, el próximo mes de diciembre.

En España hay hasta la fecha 19 elementos inscritos, entre ellos las Fallas de Valencia, la cetrería, la dieta mediterránea, la fiesta de los patios de Córdoba, el flamenco, los castells o el silbo gomero. El último registrado (el año pasado) fue el proceso artesanal para la elaboración de la cerámica de Talavera de la Reina y El Puente del Arzobispo (en ambas localidades españolas hay sendas comunidades de artesanos que fabrican con métodos tradicionales objetos de cerámica de estilo talaverano para uso doméstico, decorativo y arquitectónico.

El proyecto para la candidatura del marisqueo en la ría de Muros-Noia está actualmente en fase de elaboración de estudios técnicos. Cuando ésta finalice, afrontará su primer reto: conseguir que la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta de Galicia reconozca precisamente su valor patrimonial.

SOCIO INTERNACIONAL. Asimismo, se está buscando un socio internacional para presentar una candidatura conjunta ante la Unesco, es decir, un proyecto relativo a una actividad similar. En esta búsqueda se ha empezado por el territorio europeo.

También se están planificando las acciones de difusión. El vídeo de la candidatura ya se elaboró y puede verse en www.marisqueomurosnoia.com. En cuanto a los plazos, pese a que el estado de alarma los dilatará, en principio está previsto remitir la candidatura a la Unesco en marzo de 2021, previa aprobación de la Dirección Xeral de Patrimonio.