El 8-M vuelve a resonar en las calles de Compostela con el feminismo separado

Hubo dos concentraciones, una organizada por la Asamblea Feminista de Compostela y apoyada por la Plataforma Feminista Galega y otra por la Marcha Mundial das Mulleres, en la que hubo mayor división // Los más pequeños tuvieron gran protagonismo // “No somos histéricas, somos históricas”, uno de los mensajes

Las calles de Compostela se tiñen de morado

Javier Rosende Novo

Santiago acogió este 8 de marzo, Día de la Mujer, por primera vez, con dos manifestaciones distintas convocadas por diferentes sensibilidades, ya que la plataforma Galegas 8M que desde 2018 servía de paraguas para todas las movilizaciones de ese día no se activó este año. La reciente ley del “solo sí es sí” avivó esa separación en el feminismo, que ya se mostró dividido en 2022 por la llamada ley trans en varios puntos del país. La Asamblea Aberta Feminista de Compostela, apoyada por la Plataforma Feminista Galega, convocó una concentración que partió a las 19.00 horas de la plaza 8 de marzo y terminó en la plaza do Obradoiro. Segundo habían reflejado en un comunicado previo, optaron por este horario porque “buscamos que o 8M sexa un día de reivindicación e loita no que todas a mulleres que teñen a cargo o coidado de persoas dependentes teñan a posibilidade de participar na manifestación”. Paralelamente la Marcha Mundial das Mulleres convocó otra a las 20.00 horas desde el mismo punto que la anterior, pero que concluyó en la Plaza do Toural. A esa misma hora partió también la organización estudiantil Erguer, el BNG, la batucada feminista, quienes en un primer momento desconocían donde pondrían punto y final al trayecto.

A pesar de estas circunstancias y de ser una tarde pasada por agua, la capital gallega se volvió a teñir de morado, el color del feminismo, con multitud de banderas y soflamas, siendo el primer 8-M tras la pandemia sin ningún tipo de restricción ni mascarillas.

Con mucha participación en ambas marchas, que estuvieron a punto de solaparse con motivo de que la primera se retrasó hasta cerca de las 19:45 horas, “co fin de agardar por todas as que se manifestan”, los mensajes que más se repetían hacían alusión a la violencia que sufren las mujeres. “No somos histéricas somos históricas”, “Yo no salí de tu costilla, tu saliste de mi coño o “Estás preciosa cuando luchas por tus derechos” fueron algunas de las frases que se puideron leer en las pancartas de los asistentes. También fueron característicos los gritos siendo el más repetido “aquí está, aquí se ve o feminismo galego en pé”.

Una niña fijándose en una de las pancartas del 8M / jesús prieto

Una niña fijándose en una de las pancartas del 8-M / Jesús Prieto / lorena rey

La gran mayoría de los participantes fueron mujeres, si bien llamó la atención la presencia de los niños y niñas de Infantil y Primaria del colegio Apóstolo de Santiago que acudieron con su familia a la primera marcha con una pancarta que decía “o futuro é feminista”. Una de las madres comentó a este medio que en una ocasión su hija recibió un comentario de un compañero que decía: “Ti non podes facer isto porque eres unha nena”, a lo que ella respondió: “claro que si que podo”. También una joven llamada Nayra Mato relató que “xusto vindo para a manifestación recibín un comentario machista dun rapaz por levar unha falda corta”, lo que se traduce en que “aínda queda moito por facer”. Además, aseguró que “sempre vamos con medo pola rúa”, y en su caso “cando é de noite e vou soa chamo por teléfono aos meus pais”.

Con similitudes a la hora de reclamar mejoras en Educación,Sanidad y en el ámbito laboral en lo que atañe a las mujeres y sin dejar atrás la lucha contra la violencia de género, en las dos convocatorias se leyeron sus respectivos manifiestos. El de la Asamblea Aberta Feminista de Compostela comenzó con una declaración de intenciones. “Cada vez somos máis e cada vez é máis difícil para o poder ignorar as nosas demandas. E que non nos conten contos compañeiras, a nosa situación como mulleres continúa rodeada de precariedade e a igualdade real e efectiva está lonxe de acadarse”. Las diferencias entre hombres y mujeres en el trabajo centraron la idea principal del texto. “A falta de opcións reais para unha conciliación laboral e familiar viable segue obrigando a moitas mulleres a ter que optar entre o traballo fora do fogar e o coidado dos seres queridos” fue uno de los razonamientos incluidos en el manifiesto. No podían no tener palabras frente a los asesinatos machistas: “nin perdón nin olvido; xustiza feminista! Sempre libres, sempre vivas compañeiras!” Concluyó con una breve frase: “Porque o futuro é feminista!”.

Por su parte, el manifiesto de la Marcha Mundial das Mulleres se basó en un decálogo de exigencias bajo el lema “Servizos públicos para mellorar a vida das mulleres!”. La palabra “queremos” dio paso a cada una de las peticiones: Empleos, salarios y pensiones dignas, maternidades dignas, educación feminista para transformar el mundo o salud para la vida de las mujeres fueron algunos de ellos. El texto concluyó con una clara reivindicación: “Hoxe e sempre até lograr unha transformación real, seguiremos en marcha até que todas sexamos libres. Resistamos xuntas, marchemos xuntas!”.

Este 8M se evidenció que las calles fueron, por un día, para las mujeres, aunque cada un siguió un camino diferente.

DESDE EL CONCELLO

“APOSTAMOS POR UNHA SOCIEDADE IGUALITARIA”

···La plaza del Obradoiro acogió ayer, a las 11.30 h, la lectura de un manifiesto que abrió y finalizó la concejala de Igualdad, Mercedes Rosón, seguida por las intervenciones de las concejalas del BNG, Goretti Sanmartín, de CA, María Rozas, del PP, María Castelao. Desde la Corporación municipal quisieron “celebrar e reivindicar o Día Internacional das Mulleres”, ya que a pesar de que “Compostela sempre estivo á vangarda da loita contra a desigualdade”, cabe “afianzar todos os avances conseguidos”. El manifiesto reiteró, entre otros aspectos, la obriga desde os poderes públicos dar resposta ás violencias de xénero, “a cara máis escura da desigualdade”, así como seguir desde o ámbito local co “compromiso de construír unha sociedade igualitaria, que garanta os dereitos de todas as persoas, así como a participación activa na vida local”.