El conductor que rompió a martillazos el radar de Conxo acude a la Policía Local para confesar los hechos

Se bajó del coche de madrugada tras 'notar' el chispazo del cinemómetro

Imagen del radar de Conxo dañado a causa de los martillazos

Imagen del radar de Conxo dañado a causa de los martillazos / Jesús Prieto

El conductor que en la madrugada del viernes rompió a martillazos el radar de Conxo acudió horas después a dependencias de la Policía Local para confesar los hechos. El recorrido cronológico de este suceso comenzó a las dos de la madrugada, cuando un vecino de O Milladoiro circulaba por el periférico en sentido salida de la ciudad y a la altura del radar de Conxo 'notó' el chispazo del cinemómetro ubicado en este punto de la capital gallega. A continuación, martillo en mano, bajó del vehículo y golpeó el cristal exterior del medidor de velocidad hasta romperlo. Ya durante la mañana de este viernes, el alcalde de Santiago confirmaba en rueda de prensa que el autor de los hechos ya había sido identificado y, por la tarde, desde el departamento de Seguridade Cidadá comunicaban que se había personado en la sede de la Policía Local para asumir lo sucedido.

Fuentes municipales añaden que el cinemómetro situado en sentido O Milladoiro tendrá que ser revisado para arreglar los daños sufridos, cuyos costes económicos deberá asumir el autor de los hechos.

El radar de Conxo entró en funcionamiento en el año 2020 y desde entonces es uno de los que más sancionan en la ciudad. Muestra de ello es que en los primeros tres meses generó más de 17.000 multas, más de la mitad de las que se registraban en el Concello de Santiago por cuestiones de tráfico en todo un ejercicio, incidieron entonces desde los grupos de la oposición.

Actualmente, en Santiago hay dos radares fijos: uno de ellos alterna su ubicación entre Conxo y O Restollal; y el otro está situado en el túnel del Hórreo. Además, son cinco las cámaras colocadas en distintos puntos de la ciudad que vigilan que nadie se salte un semáforo en rojo, los denominados fotorrojos: en Amor Ruibal, en la confluencia de Rodríguez de Viguri con la Praza de España; en la unión entre Romero Donallo y Frei Rosendo Salvado; en la avenida de Lugo y en la Praza da Paz.