Los informadores turísticos a pie de calle comienzan a ‘patrullar’ para proteger el patrimonio de Santiago

El Concello de Santiago pondrá en marcha este viernes el servicio de informadores turísticos a pie de calle con el objetivo de concienciar a peregrinos, turistas y visitantes sobre “o dereito que teñen de gozar do noso patrimonio e a obriga que teñen de coidalo e respetar a vida cotiá da veciñanza”, indicaron ayer desde Raxoi, después de que la junta de gobierno local ya adjudicase esta fase de la campaña Fráxil a la empresa Ardora Comunicación.

Los diez informadores a pie de calle se organizarán por parejas, en horario de 09.00 a 13.00 horas, y se situarán en las cuatro entradas del Camino en la ciudad y en los principales puntos turísticos del casco histórico, especialmente en las cuatro plazas ubicadas en el entorno de la Catedral. “Estableceranse unha serie de quendas para que as cinco parellas poidan informar de xeito directo ao maior número de posible de persoas que visitan a cidade”, indican desde el gobierno local. Las personas que realizarán esta acción, que se prolongará durante 45 días, contarán “cunhas tablets coas que informarán de xeito sinxelo e ameno sobre o obxectivo da campaña Fráxil e o Código de Boas Prácticas Turísticas, incluindo a necesidade de reducir os niveis de ruído, especialmente no caso dos grandes grupos”.

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Además, también darán información sobre otros puntos de interés de la capital gallega fuera del casco histórico, “cun novo material elaborado para destacar que os atractivos de Santiago van moito máis alá dos que se poden atopar na améndoa, co obxectivo de deslocalizar os fluxos turísticos na cidade e aumentar a estadía media das persoas que nos visitan”, inciden desde Raxoi.

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Esta iniciativa para concienciar sobre “a necesidade dun turismo respectuoso” es el núcleo central de la campaña Fráxil de este verano, que pretende ser “máis ambiciosa” que la que se desarrolló por primera vez el año pasado, cuando el Concello elaboró un código de Boas Prácticas Turísticas, “respostando así", subrayan, "ás demandas de diferentes asociacións veciñais”.

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La primera fase de Fráxil comezó en julio con la entrega de diferentes materiales en más de 100 albergues, comercios y locales de hostelería. Este año, el reparto de materiales se realizó “non só no propio Concello, senón tamén en albergues dos últimos tramos dos diferentes Camiños”. En concreto, en el Camino Francés, en Melide, Arzúa y O Pino; mientras que en la Ruta Inglesa se hizo en Oroso; en el Camino Portugués, en Padrón y Ames, y en la Vía de la Plata, en Silleda, A Estrada, Vedra y Boqueixón. Además, en esta fase de estreno, el Concello ha distribuido miles de carteles, trípticos, bolsas y manteles para informar sobre el Código de Boas Prácticas Turísticas en Compostela.