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Piden tres años de prisión para un fisioterapeuta que abusó de una paciente en Santiago

Aprovechó un masaje en la espalda para tocar las partes íntimas de la víctima varias veces

Juzgados de Fontiñas

Juzgados de Fontiñas / ECG

Arturo Reboyras

Arturo Reboyras

Santiago

Tres años de cárcel y 30.000 euros de indemnización. Es la pena que solicita el Ministerio Fiscal para un fisioterapeuta que presuntamente abusó de una paciente en Santiago y que será juzgado la próxima semana en la sección Sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en la capital de Galicia. Los hechos se remontan al 2 de octubre de 2020, cuando al filo de las 17.15 horas la víctima acudió a la clínica de fisioterapia en la que trabajaba el acusado, un hombre de 40 años.

Según se recoge en el escrito de calificación, era la segunda vez que la víctima acudía a la consulta con el sospechoso. La mujer iba a la clínica para tratar sus dolores de espalda y el abuso se produjo supuestamente cuando ambos quedaron solos en una de las cabinas de masajes. Al parecer, en el momento que la víctima se puso boca abajo en la camilla, en ropa interior, el acusado «le metió la mano dentro de la braga y le tocó los genitales, le tocó y presionó la zona púbica, y le rozó con las yemas de los dedos los labios vaginales, y presionó con los dedos para buscar la vagina». La Fiscalía indica que el hombre, al ser interpelado por la víctima, continuó con el masaje en la espalda, al tiempo que le hizo comentarios como: “Perdona, que me puse muy tontorrón”; “perdona, es que tienes un cuerpazo y tuve que morderme la lengua”. El Ministerio Público entiende que el acusado aprovechó el momento que estaban solos en la consulta para realizar estos hechos, lo que provocó que la víctima tuviera temor de lo que le pudiera pasar.

Los hechos son constitutivos para la Fiscalía de un presunto delito de abuso sexual. Además de la pena de tres años de cárcel y la indemnización de 30.000 euros, también se pide para el acusado, que en el momento del suceso carecía de antecedentes penales, la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la víctima por un periodo mínimo de cinco años. 

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