Muere José María Díaz, deán emérito de la Catedral de Santiago, a los 95 años
Archivero-Bibliotecario entre 1979 y 2011, fue elegido deán en 2006 y ocupó el cargo hasta 2012
El funeral se celebra este lunes en la Catedral de Mondoñedo

José María Díaz Fernández, deán emérito de la Catedral de Santiago, falleció este domingo en Mondoñedo. / Iñaki Osorio
José María Díaz Fernández, deán emérito de la Catedral de Santiago, falleció este domingo en su Mondoñedo natal, a la edad de 95 años. El funeral por su eterno descanso se celebrará este lunes, 21 de julio, a las 17.00 horas, en la Catedral de Mondoñedo, en cuyo claustro recibirá sepultura.
José María Díaz fue ordenado sacerdote en 1954 y nombrado canónigo de la Catedral de Santiago, por oposición, en 1972. Entre 1979 y 2011 desempeñó el cargo de Archivero-Bibliotecario. Elegido Deán Presidente del Cabildo en 2006, ocupó el cargo hasta 2012. En la ciudad de Santiago fue también capellán de las Madres Mercedarias.
En octubre de 2011, José María Díaz renunció al cargo de canónigo archivero, que ocupaba desde hacía 36 años, a raíz del robo, en julio de ese mismo año, del Códice Calixtino del Archivo de la Catedral. En aquel momento, Díaz se mostró «consternado» y expresó su deseo de renunciar también al cargo de deán, sin embargo, esta petición fue rechazada por el entonces arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio.
José María Díaz Fernández nació en Mondoñedo (1929), el mismo pueblo en que lo hizo el escritor de la Galicia mágica, Álvaro Cunqueiro. No exento de ingenio, como éste, José María confesaba en una entrevista publicada en 2009 por el Grupo Prensa Ibérica, que en su labor como archivero sentía la misma sensación que había reflejado Baltasar Gracián en su obra El Discreto: la de hablar con los muertos. «Eso mismo -aseguraba- me sucede a mí cada vez que leo un manuscrito antiguo: que siento que entro en contacto y hasta hablo con el autor». Díaz fue el último canónigo que entró en el Cabildo de Santiago por oposición, a principios de los 70. No tardó en hacerse cargo del «lamentable estado» en que se encontraba el archivo catedralicio en aquellos años. De hecho, el orden, la catalogación, la introducción de las nuevas tecnologías en el que él considera el «verdadero tesoro» de la Catedral tienen a este mindoniense como principal artífice.

José María Díaz con Benedicto XVI / ECG
El robo del ‘Códice Calixtino’, su peor momento
Elegido deán en 2006, y reelegido en 2010, los asuntos del archivo siempre fueron prioritarios en su gestión. Era un hombre entregado al «tesoro», por eso nadie duda que, al margen de las responsabilidades de su cargo, el robo del Códice Calixtino, cuyo autor fue José Manuel Fernández Castiñeiras, electricista de la Catedral en ese momento, fue la peor de las heridas que pudo haber recibido: en cuanto se le dio la noticia tuvo que ser trasladado a Urgencias víctima de un amago de infarto. Seriamente afectada su salud y tras reiteradas peticiones al Arzobispado para que fuese relevado, el 19 de diciembre de 2012 monseñor Julián Barrio liberaba por fin a Díaz Fernández de la «condena» de tener que visitar el infierno en que para él se había convertido su despacho de deán desde el famoso hurto.
A partir de ese momento, se retiró a su Mondoñedo natal. Este lunes, a las 17.00 horas, en la Catedral de Mondoñedo, se celebrará su funeral.
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