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Informe de la UDC

Los grupos no garantizan apoyo a Raxoi para que una empresa mixta gestione el agua en Santiago

Un informe de la UDC concluye que el modelo público-privado es el más «equilibrado» para el contexto actual

Depósito de agua del Concello de Santiago, situado en el Camiño dos Vilares

Depósito de agua del Concello de Santiago, situado en el Camiño dos Vilares / Antonio Hernández

Manu López

Manu López

Santiago

La comisión creada por los grupos municipales de Santiago para definir la gestión del ciclo integral del agua celebró ayer una reunión clave. La Cátedra da Auga de la Universidade da Coruña (UDC) presentó un informe en el que analiza la fórmula más sostenible y eficiente para la prestación del servicio. La cita concluyó antes de lo previsto, sin llegar a debatir sobre el contenido del estudio y con dudas entre los grupos de la oposición sobre el apoyo al modelo por el que se decanta el gobierno local, el de una empresa mixta con mayoría de capital público. Las diferencias quedaron patentes incluso a la hora de interpretar las recomendaciones del informe, puesto que no todos sacaron las mismas conclusiones.

El análisis de la UDC, al que ha tenido acceso este diario, señala que, entre las múltiples fórmulas de gestión posibles, «non existen argumentos obxectivos para asumir en abstracto a superioridade dalgunha delas, senón que a resposta acaída debe axustarse ás variadas circunstancias de cada caso». Los miembros de la Cátedra da Auga consideran que el estudio previo, realizado en 2020, contiene «supostos infundados ou refutables» sobre el ahorro económico que implica la gestión indirecta, al mismo tiempo que advierten que el control público «é custoso e complexo». Así, indican que la creación de una sociedad mixta municipal «xurde como unha resposta equilibrada ao contexto» de Santiago.

El documento propone diferentes escenarios de inversión en función del desembolso público que se realice en cada una de las acciones que se deben acometer, con oscilaciones entre los 41 y los 110 millones de euros. Además, se establece un horizonte temporal para la ejecución de las obras necesarias en las redes de abastecimiento y saneamiento, con periodos de cinco, diez y veinte años.

Mayor control público

Tras la reunión de la comisión, Raxoi difundió una nota en la que apunta que el informe «recomenda avanzar cara un modelo con maior control público e coa capacidade técnica adecuada, que combine eficiencia, financiamento e gobernanza democrática». Además, el gobierno considera que quedó patente que la disyuntiva está entre un modelo de concesión privada o el de la empresa mixta.

El edil de Servizos Básicos, Xesús Domínguez (BNG), afirmó que «estamos ante unha oportunidade única, non só para resolver unha situación administrativa, senón para mellorar a xestión da totalidade do ciclo da auga e solucionar problemas estruturais da rede», situando la eficiencia y la sostenibilidad como eje fundamental.

La otra pata del ejecutivo mostró su preferencia por el modelo mixto a través de la tenienta de alcaldesa, María Rozas (CA). A su juicio, el informe deja claro que el modelo más eficiente «non é o da empresa privada». Así, añadió que «para nós o importante é garantir o control público do servizo e que esa empresa mixta non reproduza o funcionamento dunha empresa privada». Además, cree que lo ocurrido en la comisión debe servir para que «os grupos que tiveran aínda dúbidas abandonen definitivamente a idea de que o mellor para Santiago é outra concesión».

Dudas de la oposición

Los grupos de la oposición salieron del encuentro sin tener claro, ni mucho menos, dar su apoyo al modelo mixto. El concelleiro del PP, José Antonio Constenla, explicó a este diario que la prioridad de su formación es agilizar el proceso para tener el nuevo contrato, dado el estado de la red. Constenla interpreta que el informe «no determina que la empresa mixta sea la mejor opción, eso no lo dice en ningún caso». El edil pidió al gobierno que «deje de jugar el gato y el ratón» y entrar a debatir sobre cuál es la mejor manera de prestar el servicio. Pese a no definir su postura, valoró que «la fórmula más rápida ahora mismo para resolver la cuestión es la concesión».

El portavoz socialista, Sindo Guinarte, destacó que para su grupo «o importante é ir a unha renovación da actual concesión que leva tantísimos anos caducada»y permita acometer las inversiones necesarias. «Se o modelo é concesional ou é unha sociedade mixta é algo que necesitamos estudiar máis a fondo», subrayó, por lo que sostuvo que serán necesarios «informes más detallados», una vez que la comisión apunte en alguna dirección.

La edil no adscrita, Mila Castro, calificó de «decepcionante» el estudio de la UDC al entender que «non conclúe en ningunha fórmula de xestión». Castro echa de menos más detalles sobre la viabilidad económica de la empresa mixta y advierte de que la ley impediría a Santiago crear esta sociedad antes de 2027 porque el Concello está sometido hasta entonces a un Plan Económico Financiero. La concelleira también cuestionó que algunas obras puedan demorarse hasta 20 años.

Decisión final en el pleno

Las conclusiones que alcance la comisión para la gestión del ciclo integral del agua deberán ser llevadas al pleno, que será en última instancia donde se decida la fórmula para la prestación del servicio. Sin embargo, algunos ediles de la oposición consideran que el proceso aún está lejos de llegar a ese punto.

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