Cardenal Marto, a los peregrinos: “Pedid la paz y trabajad por ella”
Santo Domingo de Bonaval acogió ayer el acto de recepción del legado pontificio: el cardenal António Augusto dos Santos Marto, obispo emérito de Leiria-Fátima y enviado especial del papa Francisco para la Peregrinación Europea de Jóvenes. Junto a las autoridades civiles, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el alcalde del ayuntamiento de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, estuvieron presentes el arzobispo compostelano, monseñor Julián Barrio; el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Juan José Omella; el nuncio apostólico de España, monseñor Bernardito Auza, y una amplia representación de los obispos de España y Portugal que, durante esta semana, se encuentran participando en la PEJ.
Al comenzar el acto, se leyó la carta en la que papa Francisco concede al legado pontificio “la potestad, mientras presidas estas celebraciones, para que saludes y bendigas en nuestro nombre a los jóvenes presentes, a las autoridades civiles y a todos los fieles cristianos. Los exhortarás a ser alumnos de la paz para que, con su testimonio, de palabra y de obra, los pueblos, que caminan en tinieblas, vean la luz, gocen con júbilo y alegría, y se alegren en el encuentro con Aquel, que fortalece los reinos y los consolida con la justicia y el derecho, desde ahora y por siempre”.
Tras la lectura del nombramiento del legado pontificio, monseñor Julián Barrio dio la bienvenida al cardenal Antonio Augusto dos Santos y expresó que esta PEJ constituye “una gracia de Dios y un compromiso que nos permite asomarnos al horizonte esperanzador de la que queremos sea la nueva Europa del Espíritu peregrinando con el mensaje del Evangelio”.
El alcalde compostelano, Xosé Sánchez Bugallo, ha felicitado y agradecido la labor de todas las personas que han organizado esta peregrinación y ha dado la bienvenida a todos los peregrinos que han llegado a la ciudad y “nos trasladan alegría, ilusión y confianza en el futuro”.
El cardenal Antonio Augusto dos Santos, delegado pontificio, expresó, con emoción y alegría, su deseo de encontrarse “con los jóvenes católicos de Europa: para llevarles el saludo, el afecto y la bendición del santo padre; para avivar las energías espirituales de los jóvenes y fortalecerme con ellos; para proclamar la palabra de Jesucristo escogida como lema de esta Peregrinación europea de Jóvenes: “Levántate y sé testigo, siguiendo el testimonio del Apóstol Santiago que te espera”.
Esta peregrinación, tal y como manifestó el prelado a los jóvenes, “es un momento privilegiado de encuentro, desde el cual podéis enviar una señal clara: los jóvenes, que somos el presente y el futuro de la Iglesia y del mundo, queremos la paz, deseamos la paz y haremos todo lo posible para trabajar por ella”.
Una vez finalizado el acto de recepción en la iglesia de Santo Domingo, los presentes realizarom una peregrinación simbólica del último tramo del Camino Francés hasta la tumba del Apóstol. El acto finalizó en la catedral con una liturgia y el vuelo del botafumeiro.
La PEJ será clausurada hoy con una misa solemne en el Monte do Gozo, a partir de las 10.00 horas.