Cuarenta años sin un julio tan seco: no llovió en todo el mes en Santiago

Si pensamos en el tiempo que ha hecho este mes de julio, probablemente a todos nos venga a la cabeza algún día de playa o piscina, o una tarde en una terraza de la zona vieja. El buen tiempo ha predominado todo el mes, con una temperatura superior a los veinte grados. Y seguro que es difícil recordar un día en el que hayamos sacado el paraguas de casa. La lluvia no ha tenido nada de protagonismo en julio en la ciudad y, aunque este mes suele ser seco, los registros de este año son los más bajos desde 1981.

El Observatorio Astronómico Ramón María Aller, de la Universidade de Santiago de Compostela, situado en el Campus Vida, realizó su informe mensual de julio y, en él, no pudo incluir los litros por metro cuadrado de agua caída sobre la ciudad. “Estatísticamente, o mes de xullo é o máis seco na contorna de Compostela, porén é difícil que no sétimo mes do ano non se recolla un mínimo de choiva”. Y eso es precisamente lo que ha sucedido este año, según los datos de la estación meteorológica del observatorio. “Facía 39 anos que non acontecía, sendo preciso remontarse a 1981, cando a longa seca se prolongou dende o 26 de xuño ata o 9 de setembro”, explica el director del Observatorio Astronómico Ramón María Aller, José Ángel Docobo.

¿Qué pasó en 1981? Hubo una época de sequía todo el verano, desde finales de junio hasta el 9 de septiembre. Según el profesor Docobo, hace cuatro años se registraron los dos meses estivales más secos desde ese verano de 1981, con datos de 1,2 litros/m2 de lluvia en julio, y con 12,6 l/m2 en agosto. Cuatro años después, la ausencia de lluvia en julio ha batido ese récord. Si seguimos remontándonos en el tiempo, encontramos que en los meses de julio más secos de los últimos 50 años las cifras son de 0,9 l/m2, en 1993; 1,2 l/m2, en 2016; 1,8 l/m2, en 1986; 4,2 l/m2, en 1978; y 4,7 l/m2, en 1984. Todos son registros superiores a los de este julio y, para encontrar un mes igual de seco anterior al de 1981, hay que fijar la vista en 1967, cuando tampoco llovió en el séptimo mes del año. Aunque tradicionalmente julio sea poco lluvioso, en marzo de 1997 las precipitaciones fueron prácticamente inapreciables, con una marca de menos de 0,1 l/m2 durante dos días. Otros meses sin agua fueron agosto de 1998, con 1l/m2 en un día. En octubre de 2007 y en mayo de 1997, los datos de lluvia se situaron por debajo de los cinco litros/m2.

A este julio sin agua, hay que sumarle otra característica. Predominaron las temperaturas altas, con máximas por encima de los 25 grados durante veintisiete de los treinta y un días del mes. Solo cuatro jornadas hubo máximas inferiores, de 21, 22 y 23 grados. En ocho ocasiones, las máximas superaron los treinta grados, siendo 34 la más elevada de julio. En las mínimas, la más baja fue de 12 grados.