Del aula al laboratorio: joven investigadora en el IDIS con solo 17 años

La modalidad de Bachillerato STEM, de excelencia en ciencias y tecnología, está permitiendo que descubramos poco a poco el joven talento investigador oculto entre las aulas de los distintos centros compostelanos. Primero fueron los alumnos del Xelmírez II los que expusieron sus proyectos ante Ángel Carracedo, sobre la impresión 3D o complejas operaciones matemáticas, y ahora es una alumna de la Compañía de María la que destaca por el trabajo realizado. Fátima Vilar tiene 17 años, cursa el último año de Bachillerato y, durante meses, ha sido casi una más en el Instituto de Investigación Sanitaria (IDIS) del CHUS. Después de escoger esa modalidad de Bachillerato a finales del último curso de Secundaria, llegaron las prácticas en diferentes ámbitos. Todo con el objetivo de encontrar campos de interés a los que dirigir sus intereses investigadores. Pero a Fátima ninguno le acababa de llenar, por lo que decidió buscar por su cuenta. Con la ayuda del colegio, comenzaron los contactos con distintos centros de investigación.

La búsqueda terminó cuando Fátima descubrió el IDIS y sus investigaciones sobre el cáncer de endometrio. “A ellos les parecía interesante que colaborase y yo acepté encantada. Hice el estudio de la biopsia líquida aplicando técnicas digitales para la detección precoz”, explica la joven investigadora. Fátima empleó el verano para acudir diariamente al IDIS, donde su tutor, Miguel Abal Posada, del grupo Oncomet -Grupo de Oncología Médica-, le explicó todo el contexto clínico. “Al principio no entendía nada pero fueron encantadores. Yo llegaba y me decían que íbamos a extraer el ADN circulante del plasma sanguíneo, e iba apuntando en mi libreta para después poder hacer la memoria. También pude aprender sobre otros proyectos”, relata esta alumna. De todo lo aprendido, la joven destaca la importancia de la investigación y de contar con técnicas de diagnóstico temprano.

Tras agradecer al IDIS, especialmente a su tutor, y a los profesores del colegio toda la ayuda recibida, Fátima, que obtuvo un 10 en su proyecto, piensa ya en qué camino escogerá tras el instituto. A las generaciones que vienen detrás de ella, les deja una recomendación: el STEMBach, una rama que pone en práctica la ciencia y que permite tener el primer contacto con la Universidad. “Es similar al Bachillerato científico pero con contactos más profesionales, aprendes a hacer los trabajos más rápido, de manera más eficiente, y tienes la importante parte práctica de la investigación”, detalla.