Magia y clases de cocina para aparcar las hamburguesas

El ataque del coronavirus cortó de cuajo toda la actividad cultural en Santiago, y por supuesto también en los colegios mayores que más se destacan por promover actividades de todo tipo tanto para el disfrute de sus residentes como para personas ajenas a los centros. Eso es lo que ha ocurrido en el CM Arosa, que ahora se encuentra más silencioso que nunca después de un arranque de año que fue espectacular en cuanto a conferencias, ciclos, debates y cursos de todo tipo. Justo antes de que se declarase el estado de alarma, las numerosas residentes en este colegio del Ensanche compostelano tuvieron ocasión de participar en un Masterchef de cocina que contó con una amplísima participación. Lógico, porque los fogones están cada vez más de moda y hay muchísima gente interesada en saber cocinar algo más que una hamburguesa o unos tallarines al estilo pobre con tomate de bote. En este curso, las alumnas tuvieron ocasión de aprender a hacer platos vistosos que cuestan poco dinero gracias al apoyo de profesores muy cualificados. Su evolución en este terreno fue casi mágica, aunque los que practicaron con ellas ilusionismo de verdad fueron los magos que se dejaron caer por el colegio. Muchos profesionales de todos los ámbitos visitaron también el Arosa justo antes de que la alarma sanitaria mandase todo al traste, entre ellos el el reconocido psiquiatra Carlos Chiclana. El joven médico y surfista Guillermo Carracedo era otro de los invitados, pero al final no puedo ir por culpa del inicio de la pademia. Por si no lo saben, Guillermo es hijo de Ángel Carracedo, un crac internacional en genética y en medicina legal.