Un puesto de marisco de la Plaza de Abastos participa en el Plan del Comercio Minorista para expandirse
Dos establecimientos de moda y calzado infantil de Ribeira y A Pobra se benefician también del programa de la Cámara de Comercio para consolidar nuevos negocios
La Cámara de Comercio, de Santiago ha desarrollado el Plan Integral de Apoyo a la Competitividad del Comercio Minorista 2016, un programa de la Cámara de España y la Secretaría de Estado de Comercio del Ministerio de Economía que cuenta con el cofinanciamiento de FEDER.
Esta iniciativa, que se lleva a cabo por cuarto año consecutivo en la Cámara compostelana, persigue el fomento de la innovación empresarial, la modernización del punto de venta y el impulso a la capacitación de autónomos, pymes y micropymes del sector comercial. El plan contempla ayudas para mejorar la competitividad de los comercios de la demarcación cameral a través de diagnósticos individualizados e informes de recomendaciones de mejora para que los locales comerciales puedan asumir las metodologías y soluciones e incrementar su situación competitiva.
imagen actualizada. Lucía Tourís Otero lleva en la sangre el marisco. Su abuela inició el negocio familiar con un puesto en la Plaza de Abastos de Santiago hace medio siglo. Esta joven, originaria de Vilanova de Arousa, decidió continuar con el negocio y consolidar la empresa como una de las productoras más antiguas de marisco, altamente especializada y con una amplia experiencia en el sector, además de regentar el 202, 203 y 204 de Abastos. Pero para adaptarse a los nuevos tiempos, Lucía ha participado en el Plan del Comercio Minorista de la Cámara. Su intención es renovar la imagen de la empresa para atraer a nuevos clientes y fidelizar, más aún, a aquellas personas y restaurantes que acuden a la plaza a comprar el marisco más fresco de la zona sur de la ría de Arousa con los que tiene un trato muy personal y directo.
Cuenta Lucía Tourís que en 2017 la empresa de tercera generación Mariscos Illas Atlánticas pasará a denominarse Mardelia e iniciará su camino en la venta online. "Nuestra intención es vender marisco por internet a nivel nacional, aunque mucha gente todavía es reacia a la compra de producto fresco de alimentación por miedo a que no se garantice su calidad". Tras su diagnóstico del plan minorista, Lucía Tourís destaca que, para aumentar las posibilidades de éxito de la línea de negocio online, la empresa intentará asumir los gastos de envío garantizando un transporte en 24 horas "rápido y en condiciones específicas de fragilidad y frío".
Calzado para enanitos. La emprendedora Manuela Monteagudo decidió abrir en el 10 de la calle Canarias de Ribeira la tienda 7 enanitos, una zapatería infantil multimarca. Para distinguirse de otras del sector, Manuela incluye en su gama de productos una marca propia de calzado, lo que le permite ofrecer al cliente un mejor precio sin abandonar el diseño y la calidad. "Hay muchas ofertas en el mercado, pero los padres deben tener en cuenta que un mal calzado puede ser perjudicial para el desarrollo de los pies de los niños", señala.
Con su participación en el plan del comercio minorista, Manuela quiere mejorar sus ventas y ampliar la cartera de clientes a través de la innovación comercial. En su diagnóstico empresarial, la Cámara recomendó a la emprendedora realizar un pequeño cambio en el escaparate y rectificar alguna señalización en materia de seguridad e imagen. "Me gustaría que los clientes tuviesen a 7 enanitos como referencia a la hora de calzar a los niños por diseño, calidad, precio y lo más importante buena atención. El objeto es personalizar cada venta ofreciendo una relación de familiaridad". En un futuro próximo, Manuela pretende crear la página web de la empresa para llegar a más gente e introducirse en la veta online, tan solicitada actualmente.
Moda infantil. Ana Boo Vidal abrió en 2015 su negocio y apostó con Mi barquito de papel por la venta de moda infantil y juvenil en A Pobra (rúa Díaz de Rábago, 29). La tienda ofrece al cliente las últimas tendencias y gran variedad de prendas y estilos que se caracterizan por la calidad a buen precio. Además, para hacer la tienda más atractiva la emprendedora decidió crear una zona amplia de juegos para los niños.
Aunque considera que la imagen de su tienda es buena entre los clientes, en cuanto a la ropa y la atención, Ana Boo cree que puede mejorar la productividad del negocio. Por ese motivo ha participado en el programa de la Cámara. Su intención es crear una página web de la empresa con tienda online. Y reconoce que "Para que crezca Mi barquito de papel tengo que implantar nuevas tecnologías, sin duda".