Entra en una nueva fase la reurbanización del Hórreo, con cambios en el tráfico

A pesar de los problemas con el suministro de algunos materiales, que siguen afectando a todas las obras y no solo en Santiago, la reurbanización de la rúa do Hórreo continúa avanzando y ayer experimentó un cambio importante.

Tal y como se había anunciado, durante la realización de los trabajos se mantendrán abiertos dos carriles de circulación, uno en cada sentido, para facilitar el tránsito por las obras.

Eso sí, se sigue recomendando que el tráfico pasante, el que no se dirige hacia el Ensanche o la avenida de Romero Donallo, use preferentemente el paso inferior para atravesar la zona y evitar así que se produzcan colapsos de tráfico en este punto.

Pero ayer los dos carriles de paso, que hasta ahora estaban situados en el lateral más próximo a las casas, se desplazaron hacia la estación de ferrocarril, donde ya están prácticamente terminadas las aceras. Quedan, eso sí, por colocar las jardineras y el resto del mobiliario urbano previsto en esta zona.

También se ha comenzado ya a levantar parte de las aceras más próximas a las casas, y se ha dejado un espacio a mayores, ya que está previsto ampliar la zona peatonal dejando solo dos carriles en el centro, y colocando un gran paso de peatones en la salida de la pasarela y el ascensor para facilitar el tránsito de los viajeros entre la Intermodal y las rúas del Ensanche.

Precisamente la reforma de las aceras ha permitido la supresión de la rampa que antes existía en el desembarco de la pasarela peatonal, y que tantas críticas provocó. También se ha solucionado la diferencia de cota entre el ascensor y la calle.

Las obras se han modificado por otra parte para acoger la gran plaza que se situará frente a la entrada principal de la estación, junto a la pasarela, ya que antes estaba proyectado dejar un espacio abierto, y ahora habrá una superficie continua entre la calle y la futura terminal del AVE, cuya construcción arrancará en 2022.