Espiño costará unos 300.000 euros más por el retraso de CA

La rehabilitación del palacete modernista de Finca do Espiño saldrá a licitación en los próximos días, y después de dos concursos anteriores, se espera que esta vez sea por fin la definitiva. El presupuesto ha aumentado en 300.000 euros para cubrir los gastos derivados del deterioro que han sufrido los antiguos muros de hormigón.

Y es que el mal estado de los mismos fue lo que provocó que casi media década después de que se inaugurara el parque, la estructura siga apuntalada y cerrada a la espera de su conversión en un edificio municipal.

El proceso de rehabilitación se inició en 2014, cuando en Raxoi gobernaba el PP, y se aprobó un presupuesto para recuperar la finca y el palacete, pero este último proyecto no se adjudicó hasta el mes de agosto del año siguiente, ya bajo el mandato de CA.

El problema surgió cuando se adjudicó la obra, y se fueron a iniciar los trabajos. La empresa se negó a firmar el acta de replanteo a la vista de que en ese año de plazo el deterioro de la estructura había avanzado, y las labores de consolidación suponían un coste mucho más elevado.

Así que fue necesario resolver el contrato con la adjudicataria antes de sacar una nueva licitación, y el acuerdo no fue fácil. De hecho, el arreglo no llegó hasta el año 2017, y supuso una indemnización para la empresa del 3 % del contrato inicialmente previsto, es decir, unos 28.000 euros, ya que la partida prevista era de 870.000 euros.

Pero tampoco entonces salió a licitación, porque el gobierno de CA anunció una modificación del plan especial para este ámbito, en concreto, para la parcela propiedad de la empresa que compró toda la finca y cedió a Raxoi la parcela, el palacete y el presupuesto para acondicionarlos, a través de un convenio por el que se reservaba un terreno edificable.

El objetivo era reducir esta edificabilidad, y la propuesta fue rechazada en el pleno por la oposición, que alertaba del difícil encaje legal que tendría cambiar las condiciones del convenio una década después de firmarlo.

Al final el resultado fue que durante el tiempo en el que se tramitó esta modificación las licencias quedaron suspendidas, y por lo tanto, también la posibilidad de sacar la obra a concurso, de forma que le correspondió al actual gobierno municipal.

Desierto Pero se volvió a repetir el mismo problema, es decir, que el paso del tiempo se volvió a hacer sentir en el estado de los muros, que no son de piedra, sino de hormigón, y no han soportado muy bien el paso del tiempo y el incendio que sufrió el pasado siglo, y el resultado fue que la licitación en este caso se cerró sin que se presentara ninguna oferta de empresa.

Así las cosas, ahora vuelve a salir nuevamente a concurso con un importante incremento en el presupuesto, y se espera que por fin antes de final de año se puedan encargar los trabajos de recuperación del palacete.

Para la obra llegó a haber un primer proyecto, del arquitecto Jean Nouvel, que consistía simplemente en consolidar los muros e instalar dentro un gran cubo de cristal, pero finalmente se optó por recuperar el palacete en la medida de lo posible, para destinarlo a usos múltiples del Ayuntamiento. El nuevo proyecto fue realizado por el arquitecto José Luis Pereiro Alonso.